sábado, 31 de diciembre de 2016

Lo que el escenario nos dejó en la ciudad de La Plata en el 2016

TIEMPO DE BALANCES 

Un repaso por la actividad teatral de esta temporada

“Cantando sobre la mesa” en el Coliseo Podestá 



















Por Irene Bianchi
DIARIO EL DIA

Cruzando la 32, disfrutamos este año de bellísimos espectáculos. El inefable “Cirque du Soleil” quitó literalmente el aliento con “Kooza”, un show de altísimo riesgo e indescriptible impacto visual. Otro que nos hizo volar fue “Peter Pan”, en versión de Marisé Monteiro, protagonizada por Fernando Dente y Natalie Pérez, dirigida por Ariel del Mastro: un tanque taquillero de las vacaciones de invierno en el Gran Rex. Al cumplirse este año 400 años de la muerte de William Shakespeare y de Miguel de Cervantes, Patricio Orozco ideó una pieza que liga a ambos autores, “Cardenio”, luciéndose en el marco de un bello teatro puesto en valor en Villa Urquiza: el 25 de Mayo (donde cuenta la leyenda que cantó el mismísimo Zorzal Criollo). Otro marco de lujo para un actor ídem fue el Teatro Colón, donde nada menos que Al Pacino dialogó amablemente con Iván de Pineda, contando detalles sobre su vida y su método “sui generis” a la hora de componer. No actuó, es cierto, pero no era eso lo prometido. En el Complejo La Plaza nos sentamos a la mesa de “Dinner”, inquietante pieza de Moira Buffini, dirigida por Valeria Ambrosio, con un notable trabajo de Willy Lemos, y el debut actoral de Alejandro Veroutis.

Aquí cerquita, en Gral Belgrano, asistimos al Primer Encuentro Nacional de Teatro de Cámara, organizado por José Lugones y Claudia Berthoud en el Centro Cultural “El Suplicante”. La obra que cosechó más premios fue “Ensayo para una renuncia”, protagonizada por un actor de El Bolsón, Gerardo Schwartzman.

En nuestro Teatro Municipal Coliseo Podestá los platos más fuertes fueron tres: “Hoy El Diario de Adán y Eva”, de Mark Twain, dirigida por Manuel González Gil, con Miguel Angel Solá y la española Paula Cancio. Tan magnética como hace 20 años. “Ni con perros ni con chicos”, un producto de Fernando Albinarrate: deliciosa comedia musical que gira en torno al legendario Charles Laughton, con un sobresaliente Omar Callichio. “Los Monstruos”, escrita y dirigida por Emiliano Dionisi, con música y letras de Martín Rodríguez, y los descomunales trabajos de Natalia Cociuffo y Mariano Chiesa. También volvió la simpática y verborrágica Pilar Sordo, que convocó a multitudes femeninas, desafiándonos a “Ser Feliz”. Dentro del Plan Nacional de Giras del teatro Nacional Cervantes, se presentó “Los Corderos”, escrita y dirigida por Daniel Veronese, con una infalible María Onetto, actriz verosímil si las hay. El polifacético licenciado Gabriel Rolón buceó el inconsciente colectivo con sus “Historias de Diván”, con un destacado trabajo del actor platense Alejo García Pintos. Una propuesta absolutamente olvidable, a pesar del excelente elenco, fue “Jugadores”, de Pau Miró. Dos actorazos, Rodrigo de la Serna y Pompeyo Audivert, ofrecieron “El Farmer”, interesante adaptación de la novela de Andrés Rivera sobre un personaje amado y odiado como Rosas. Patricia Etchegoyen, Silvina Bosco y Viviana Saccone son las tres de “Tres”, comedia livianita sobre las familias monoparentales tan típicas de los tiempos que corren. Y la primera producción integral del Coliseo Podestá, que hará temporada de verano en el Teatro Auditórium de Mar del Plata, es “Cantando sobre la mesa”, un clásico infantil del recordado Hugo Midón, con música original de Carlos Gianni, dirección musical de Hernán Matorra, puesta en escena y dirección general de Gstón Marioni.

En la Sala Armando Discépolo de la Comedia de la Provincia vimos: “Poeta en Nueva York”, un “tour de force” de Gustavo Parodi, dirigido por Mariano Dossena, que le pone el cuerpo a la poética de Lorca. Diego Biancotto estrenó “Re-Animé”, una nueva travesura en blanco y negro que prescinde de la palabra hablada, para apostar al rico lenguaje gestual y corporal de Estanislao Pedernera y Lisandro Amado, siempre desafiando al espectador a decodificar el mensaje. En otra propuesta que liga a Shakespeare y Carvantes, Sebastián Pajoni pergeñó “El Viejo Otelo”, fusión de “El Viejo Celoso” y “Otelo”, protagonizado por Carlos “el Chuzo” Juárez, quien lamentablemente “partiera de gira” tiempo después. Tatiana Santana dirigió una pieza de Ariadna Asturzzi, “Con el alma aferrada”, con un elenco integrado por Santiago Otero Ramos, Mabel Campos, Ricardo “Mono” Ibarlín y la graciosísima Anabella Degásperi. Roberto Arlt se hizo presente en “Arlt x 3”: 3 piezas breves. “La juerga de los Polichinelas”, “Prueba de Amor” y “Un hombre sensible”, dirigidas respectivamente por Marcelo Xicarts, Marta Riveros y Claudio Rodrigo. Otra propuesta de la Comedia de la Provincia fue un ciclo de unipersonales organizado durante la breve gestión del actor platense Jorge D’Elía. El último de dichos monólogos, “Fenómeno”, de y por Eduardo Calvo, no estuvo a la altura del resto.

El Teatro Estudio abrió la temporada con “Alfonsina habita en mí”, unipersonal interpretado por Yanina Zanier Quintas, acompañada musicalmente por Santiago Epele, escrito por la actriz junto a Emilio Berasain y Martín Mendivil: acrobática recreación del imaginario de la Storni, que toma como punto de partida la casa que el destino quiso que poetisa y actriz habitaran. Emiliano Dionisi y Julia Gárriz deslumbraron con su “Romeo y Julieta de bolsillo”, maratón shakesperiana, llena de ingenio y humor, en la que esta formidable dupla se multiplica en innumerables personajes. María Inés Portillo y Mariela Marconi dieron varias “Vueltas entre Hierbas Naturales”: amable comedia escrita por la primera, dos miradas sobre el universo femenino, opuestos complementarios, dirigida por Adrián Di Bastiano.

La Portillo también presentó “Diagonando Cuentos”, en Espacio Arte Vivo: una serie de relatos, algunos de ellos propios, y una cálida referencia a su San Juan natal.

En “La Nonna” vimos “Patova”, de Alfredo Megna, unipersonal a cargo de José “Pepe” Monje, dirigido por Eduardo Lamoglia. Enorme compromiso físico y emocional de un actor con grandes recursos. Y “Mujeres de Ceniza”, comedia pasatista de Martín Guerra y Sergio Marcos, en la que Luisa Albinoni se lleva los laureles.

La Sala 420 presentó dos espectáculos de alto impacto. “Electra”, otra singular creación de los portugueses de la “Compañía Do Capito” (de quienes habíamos visto un formidable “Edipo”). Alarde imaginativo encarnado por los actores Nadia Santos, Jorge Cruz y Tiago Vegas. “El Sueño de los Elefantes”, experiencia sensorial a ojos cerrados, tremendamente movilizadora, con Alejo Duek, Josefina Casco, Matías Tozzola, Manuel Vidal, Manuel Rodríguez, Paco Cabral, Francisco Acebal, Hernán Asconiga y Guido Kohn. También en la sala de la calle 42 se presentó Verónica “Pampa” González, con su “Viajera del Río”, dirigida por Gustavo vallejos (Devenir). Emocionantes historias verídicas de inmigrantes, seres frágiles que huyen de guerras, hambrunas, persecuciones, en busca de tierras acogedoras y hospitalarias (como la nuestra), donde echar raíces.

En “Las Tablas” vimos “Venecia”, bella obra de Jorge Accame, dirigida por Paula Boero, interpretada por Carmen Baistrocchi, Gladys Cadelli, Adrián Di Pietro, Fabián Martin, Nicolás Moll y Andrea Roma. Comedia dramática que culminó una exitosa primera temporada a sala llena. Un clásico de Alejandro Casona, “Los árboles mueren de pie”, adaptada y dirigida por Gastón Beltramini, con MIrta Azzano, Gustavo Sala Espiell, Carolina Mónico, Gastón Beltramini, Soledad Molina, Vilma Filippi y Walter Rodríguez Busilachi. Cuando la mentira es la verdad. “Las Tablas” también hospedó a Sebastián Richard y su creativa y sutil dramatización de textos de Lorca en “Federico, homenaje a mi mismo”.

En “El Escape”, Diego Biancotto y Mauricio Rodríguez pusieron en escena “Fahrenheit, la otra historia”, excelente propuesta que ya tiene en su haber una gira por el Líbano, y proyectada otra europea el año entrante.

En “El Bombín” vimos “Cruising”, arriesgada pieza de Julián Arenas, que aborda un tema sórdido con humor; obra coral con historias que se enlazan y se entrecruzan.

En “El Escudo”, Omar Sánchez compartió una descarnada lectura de la realidad en “Sol Quieto”, con un elenco de actores-acróbatas-bailarines, en una perturbadora puesta coreográfica.

Dos animales de teatro, Roberto Conte y Nico Stratico, dirigidos una vez más por Norberto Barruti, ofrecieron en el Taller de la Universidad una conmovedora historia de amor trunco, “Príncipe Azul”, de Eugenio Griffero, recibiendo un merecidísimo aplauso de pie tras cada función.

En un año fatídico para la música (perdimos a Prince, Bowie, Cohen, Michael, Salgán, Mores), tuvimos el privilegio de recibir en el Estadio Unico de La Plata a bandas emblemáticas: Paul Mc Cartney, The Rolling Stones, Coldplay, Aerosmith. Un festín.

Hubo otro actor platense que se fue de gira, cuyo nombre es sinónimo de los orígenes del teatro independiente en la ciudad. Juan Carlos De Barry, “alma mater” de La Lechuza, sala que sigue viva gracias a la docente y actriz Laura Clide, su hija.

Una temporada rica, variada, con producciones locales cada año más logradas. ¡Chapeau!

jueves, 22 de diciembre de 2016

De la tragicomedia al sainete, un año para todos los géneros

Ricardo Bartis estrenó su versión de Hedda Gabler, de Ibsen

BALANCE DE LA TEMPORADA TEATRAL 2016 EN CABA

En medio de restricciones y los tarifazos, la actividad teatral validó su espacio proponiendo y contestando. Entre las tendencias temáticas que ganaron terreno se destacan la problemática de género, la familia y la militancia en los 70.

Por Cecilia Hopkins
Pagina12 | Cultura y Espectáculos

Tragedia y drama, comedia y tragicomedia, grotesco, sainete y hasta comedia bizarra, todos los géneros teatrales parecieron aportar sus particularidades a lo largo de todo el año, en los diferentes escenarios donde se hicieron públicos los devenires políticos del país. Pero como siempre ocurre, el teatro insiste en validar su espacio y con la terquedad que lo caracteriza continuó proponiendo y contestando. Aún a pesar de los tarifazos y de la retracción del público, dos hechos íntimamente relacionados que sufrieron grupos y salas por igual. Un estado de cosas éste que motivó estrategias de protesta como el llamado Apagón Cultural, en el mes de mayo, o las “24 horas de resistencia teatral” que organizó en septiembre el colectivo Espacios Escénicos Autónomos. Este diario consignó las experiencias teatrales de algunos artistas, muy pocos si se considera la enorme cantidad de estrenos que se concretaron durante el 2016. El repaso de algunos de ellos da pistas acerca de las inquietudes de, al menos, una porción de la escena porteña.

Año a año aumenta la cantidad de obras que, en las más diversas claves estéticas abordan problemáticas de género. Escrita por Natalia Villamil, dirigida por Ana Alvarado, Sola no eres nadie narró la historia de una chica trans que realiza un viaje de reconocimiento personal que la libera del círculo de prejuicios que la condena. Sobre cuerpos en pugna entre lo masculino y lo femenino, Gurisa, de Toto Castiñeiras, creó una galería de personajes en estado de desesperación. Martín Flores Cárdenas, en su versión de Otelo, de Shakespeare, puso el foco sobre la esposa asesinada por los celos del moro. Por su parte, Emiliano Delucchi dirigió Segundo Tiempo, de Ricardo Halac, quien realizó una revisión dramatúrgica con el objeto de poner al día los temas vinculados a la violencia contra la mujer. El director Hugo Urquijo estrenó Doña Rosita la soltera, de Lorca, en adaptación realizada junto a Graciela Dufau, a la búsqueda de un nuevo perfil de la novia abandonada. Por otra parte, El grado cero del insomnio representó para Emilio García Wehbi “una excusa para hablar de la negación de la condición de lo femenino en el arte, la cultura y la política”. Patricio Abadi con su obra Frida reivindicó la importancia de la voz femenina en la historia del arte y, sobre el concepto de belleza, La suerte de la fea, de Mauricio Kartun,  con dirección de  Paula Ransenberg, se refirió a los traumas femeninos sobre el propio aspecto. Marcelo Savignone en Mis tres hermanas. Sombra y reflejo, potenció el universo femenino y le encontró resonancias políticas inesperadas. La lucha de una mujer por lograr sus objetivos fue el tema central de El diccionario, obra del granadino Manuel Calzada, con dirección de Oscar Barney-Finn, sobre la vida de la bibliotecaria y lexicógrafa española María Moliner.

La familia es un tema que desde hace años inspira a muchos teatristas, Así, el director Jorge Azurmendi eligió Independencia, del norteamericano Lee Blessing, y En boca cerrada, de Juan Carlos Badillo, para realizar sendos retratos de estructuras familiares que impiden el desarrollo de sus integrantes. La misma Alvarado, en su puesta de Münchhausen, de Lucila Vilanova, eligió tomar el aspecto clínico de la obra para convertirlo en metáfora de una familia en problemas. Otro texto, El nombre de la luna, de María Emilia Franchignoni,  también inspirado en un síndrome psicológico, se refirió a la situación de jóvenes que buscan aislarse como respuesta a la rigidez de la educación recibida. En otra cuerda expresiva, en Todas las canciones de amor, de Santiago Loza, con dirección de Alejandro Tantanian y actuación de Marilú Marini, una mujer intenta cambiar la relación que mantiene con su hijo mientras espera su llegada del exterior. Obra con la que se reabrió el Teatro de la Ribera, El andador, de Norberto Airoldi con dirección de Andrés Bazzalo, abordó el tema de las expectativas femeninas en la pareja para referirse a los cambios producidos entre la época en que la obra fue escrita, los años ‘60, y el presente. Acerca de los ancianos cuyas familias deciden dejar librados a sus suertes en una residencia geriátrica, en su visita al Teatro Cervantes, la compañía española La zaranda presentó El grito en el cielo, espectáculo que, según la costumbre del grupo andaluz, también se propuso ligar lo risible con un lirismo cruel y surreal.

Aún cuando las obras estuvieron ambientadas en el pasado y en territorios indeterminados, muchos espectáculos buscaron referirse a problemáticas nacionales del presente. Augusto Fernándes estrenó 1938. Un asunto criminal, obra de su autoría sobre el nazismo que reflejó una crisis del pensamiento que, según su comparación, remite a la actualidad. Con dirección de Enrique Dacal subió a escena Los yugoslavos, del español Juan Mayorga, acerca de la soledad que se vive en las grandes ciudades. Un hombre equivocado, de Roberto Cossa, con dirección de Villanueva Cosse alertó sobre los absurdos de la burocracia.  Desde una estética onírica y cinematográfica, Osvaldo Peluffo dirigió Cámara lenta, de Eduardo Pavlovsky, una metáfora de la Argentina. En Nerium Park, del catalán Joseph María Miró, con dirección de Corina Fiorillo, una pareja busca sobrevivir a una realidad social de ajustes y recortes. En Conurbano, creación del Teatro Sanitario de Operaciones, la geografía bonaerense fue el centro de una reflexión visual sobre los cambios económicos y políticos. En El pescado sin vender, el actor y director Norberto Gonzalo propuso un conjunto de reflexiones sobre el pasado y la actualidad del país. 

Y sobre la crisis de 2001, Clara, con dramaturgia y dirección de Sofía Wilhelmi, desarrolló una trama ligada al thriller, con toques de telenovela y drama.

También aumentan año a año los espectáculos basados en historias de militantes de los ‘70. El director Héctor Levy-Daniel estrenó La fundación, de Susana Torres Molina, obra situada en tiempos de la última dictadura, en una supuesta organización cristiana encargada de entregar bebés en adopción. En 25 millones de argentinos, el autor, actor y director Lisandro Fiks se refirió a la lucha armada sobre el fondo del Mundial’78, elaborando una metáfora de la polarización ideológica de aquella época. Con dirección de Andrés Bazzalo, Los sirvientes, obra de Adriana Tursi, narró las últimas horas de Juan Domingo Perón, pero desde el punto de vista del personal de servicio de la quinta de Olivos. El familiar, obra de Oscar Vázquez, con dirección de Gabriel Fernández Chapo, abordó desde una perspectiva histórica las desapariciones de militantes en el norte argentino. Y Lautaro Perotti, en Cronología de las bestias, se refirió a historias de apropiación de bebés durante la última dictadura cívico-militar.

Entre los espectáculos basados en material narrativo o lírico, Francisco Lumerman dirigió No daré hijos, daré versos, obra de Marianella Morena, sobre la poeta uruguaya Delmira Agustini. Pablo Mascareño estrenó Alucinado suceso de lo desconocido, obra inspirada en el mundo literario de Dostoiesvki. Otros espectáculos fueron estructurados en base a historias de personalidades de la literatura. Como Mil Federicos, de Mariana Mazover, recorrido intencionadamente arbitrario por la vida y obra de García Lorca, interpretado por Hernán Lewkovicz. O Beckett y el mundo de las abejas, obra de Rubén Pires que bajo su propia dirección estrenó sobre la novela La apicultura según Samuel Beckett, del francés Martin Page. Y como homenaje a un escritor de culto nacido en Buenos Aires, Carlos Correas, la voluntad de vivir, de Bernardo Carey, fue estrenada bajo la dirección de Daniel Marcove.

Diego Lerman, Marcelo Pitrola y María Merlino crearon una versión libre de La dama del mar, del noruego Henrik Ibsen. Del mismo autor, el actor y director Ricardo Bartis estrenó su versión de Hedda Gabler, para referirse a una clase social en decadencia.  Por su parte, el actor y director Juan Manuel Correa estrenó Antígona, de Sófocles según la traducción de Elisa Carnelli y Alberto Ure. La puesta trasladó la acción a una rave donde el rey de Tebas da a conocer sus decretos para terminar con el caos de la polis. Con su versión de Tartufo, de Molière, el director Hugo Alvarez buscó referirse al momento sociopolítico actual al retratar al protagonista como un encantador de serpientes que engaña a quienes eligen creer en sus promesas. Por su parte, Francisco Civit dirigió una versión de Ricardo III en la que 13 actores encarnaron al protagonista, el despótico personaje de Shakespeare, con la idea de subrayar que todos son cómplices de las iniquidades del poder.


miércoles, 21 de diciembre de 2016

miércoles, 23 de noviembre de 2016

El viernes llega la Noche de los Teatros

ESPECTÁCULOS

Se ofrecerán obras gratuitas en doce salas de la ciudad

EL CIRUJANO

“La Noche de los Teatros”, un evento organizado por la Asociación de Teatristas de La Plata, llega a su quinta edición con una convocatoria que crece todos los años y con el permanente objetivo de dar a conocer producciones independientes locales.

En ese sentido, el viernes entre las 19 y las 24 se podrá disfrutar de obras con entrada libre y gratuita en doce salas de la ciudad.

Las entradas se podrán retirar desde una hora antes del inicio de cada función, entregándose hasta dos tickets por persona hasta agotar la capacidad de la sala.

Las propuestas serán “Príncipe azul” de Eugenio Griffero con la dirección de Norberto Barruti, a las 20 en el Taller de Teatro de la UNLP; “Yo animé” con dirección y dramaturgia de Diego Biancotto, a las 21 en el Teatro La Lechuza; “El cirujano” de Ricardo González con dirección de Manuel Vignau, a las 22 en Teatro Estudio; “Por qué todo estado deviene burocracia” de Rafael Spregelburd con dirección de Chiche Salerno, a las 20.30 en Espacio 44; y “La lengua cocida” de María Inés Portillo con dirección de Gastón Marioni, a las 21 en El Altillo del Sur.

También se ofrecerán musicales y escenas clásicas, a las 19 en La Nonna; stand up y monólogos, a las 22 en Arte Vivo; “Mamá calma”, espectáculo de música acústica, a las 22 en el Centro Cultural El Obrero; “El casorio” de Alejandra Giribaldi, a las 22 en El Fondo Espacio Teatral; “Macbeth, la ambición permanecerá viva”, a las 21.30 en El Bombín; “Criminal, al baño” de Javier Daulte con dirección de Nahuel Picone, a las 21.30 en Teatro Acción y “Silenciadas por la violencia” de Alejandra Giribaldi, a las 21.30 en El Fondo Espacio Teatral.

Fuente: EL DIA

viernes, 18 de noviembre de 2016

JUAN MOREIRA - 2016

Segunda producción integral del Teatro Municipal Coliseo Podestá en conmemoración de su 130° aniversario


El estreno de Juan Moreira, pieza fundadora del teatro rioplatense, se enmarcó en los festejos del 130º aniversario de nuestro Teatro, uno de los más emblemáticos de la República Argentina, con su estilo único y que fuera refundado por el recordado José Juan Podestá.

La obra de José Juan Podestá y Eduardo Gutiérrez se sitúa a fines del siglo XX, relata la vida del arriero Juan Moreira, quien es objeto de abusos y humillaciones por parte de las autoridades policiales y los terratenientes. Las injusticias que se cometen contra él, lo llevan a ser considerado un "gaucho malo" para las autoridades, siendo proscripto.

Malena Rizzone, Nicolas Balcone, Francisco Mendieta, Jiuliano Cabrino, Germán Romero y Luciano Guglielmino, artistas locales que integraron el elenco, bajo la dirección del reconocido director, Emiliano Dionisi.

El estreno fue el 17 de de noviembre de 2016 con entrada gratuita y contó con la participación especial de la Dirección Municipal de Colectividades y Tradicionalismo y la Comisión Permanente de la Tradición de La Plata. 

Fuente: https://coliseopodesta.laplata.gob.ar/

miércoles, 16 de noviembre de 2016

El Teatro Coliseo Podestá de La Plata de festejo

ESPECTÁCULOS | FIESTA POPULAR CON ENTRADA GRATUITA

Las celebraciones por sus 130 años comenzarán mañana con una moderna versión de “Juan Moreira”, una obra muy ligada a la historia del teatro

“JUAN MOREIRA”, DE GUTIÉRREZ/PODESTÁ

El 19 de noviembre de 1886 con la representación de la ópera “El barbero de Sevilla” de Gioachino Rossini, el Coliseo Podestá levantó el telón por primera vez en una joven ciudad de La Plata. Y ahora, con el aniversario 130 pisándole los talones, el teatro municipal está listo para celebrar a lo grande con cuatro funciones gratuitas del clásico “Juan Moreira” (ver aparte), una pieza ligada profundamente a la historia de la entidad.

Porque once años después de la apertura del Coliseo, en aquella recordada gala lírica que contó con las actuaciones del célebre tenor Roberto Stagno y la soprano Gemma Bellincioni, el teatro fue adquirido por la compañía circense Scotti-Podestá, integrada por los famosos hermanos Podestá en sociedad con Alejandro Scotti, cuñado de José.

Fue precisamente José Podestá quien tomó la novela de Eduardo Gutiérrez, “Juan Moreira”, le puso letra y la representó durante décadas, convirtiéndola en uno de los éxitos más importantes del teatro argentino.

“Pensando que la segunda producción integral del teatro estaría enmarcada en las celebraciones de este 130 aniversario de vida, qué mejor regalo que recuperar un texto del propio Podestá, además de ser uno de sus dos personajes emblemáticos: ‘Pepino el 88’ y ‘Juan Moreira’”, aseguró Gastón Marioni, director del Coliseo, en relación a la decisión de pensar un estreno aniversario que, de alguna forma, “devolviera y recuperara parte de la historia”.

Para Marioni, el hecho de estar acompañando al Coliseo en su llegada a sus 130 años implica “ser testigo de una historia llena de esfuerzos, luchas, desazones, alegrías y, por sobre todo, de mucha valentía de los tantos hombres y mujeres que desde arriba del escenario o debajo de él constituyeron un entramado histórico que está íntimamente ligado a la constitución de nuestro teatro nacional argentino”.

En esta línea, el autor, actor, docente y director teatral destacó que, a su consideración, “no hay artista que al mencionar a este teatro no se le llene la mirada de ilusión, de cariño y de un respetuoso amor netamente teatral”, algo que en él se replica de igual forma.

NUEVA MIRADA

Consultado sobre cómo llega el teatro local a este aniversario, Marioni aseguró que hay una “nueva mirada, con el intento de ser más holística, que busca contemplar todo el potencial edilicio e institucional, excediendo el mero hecho de sala de representación teatral”.

Así remarcó que en su primer año de gestión el teatro logró dar a luz “cosas inéditas” que, a pesar de larga historia, nunca habían tenido lugar, como “Barranca abajo”, en coproducción con el Cervantes, bajo la dirección de Cristina Banegas; las producciones íntegramente propias, como “Cantando sobre la Mesa” y ahora “Juan Moreira”; los ciclos “La Ciudad en escena”, “Música al mediodía” y dos talleres de extensión cultural; la programación de otras estéticas en la cartelera comercial con obras como “Terrenal”, “Los Monstruos”, “Los Corderos” y “Ni con perros ni con chicos”; la habilitación del sistema de compra de tickets online -un reclamo del público de larga data-; y, entre otras mejoras, la puesta a punto del Museo y la organización de sus visitas guiadas.

Para el año próximo, Marioni adelantó los tres pilares sobre los que andará el Coliseo Podestá, teatro que buscará, prioritariamente, “recuperar el regreso de la ópera al teatro para que sea otra oferta de programación”. Además, según el director, y para lo que necesitará “el compromiso y voluntad” del secretario de Cultura, Gustavo Silva, la sala encarará el inicio de dos grandes obras: “Por un lado la finalización de la recuperación de todos los espacios del teatro: cúpula, retroescena, depósitos, nuevas salas de museo y entrepisos; y, por otro lado, y en lo personal lo que llevará toda mi atención y tenacidad, el inicio de la creación y construcción de la Sala de Teatro Independiente y Alternativo: un nuevo espacio singular destinado a incluirse al circuito de salas del Teatro Local”.

Fuente: EL DIA

domingo, 30 de octubre de 2016

Historia El Teatro Bar La Plata

La propiedad es del año 1925, posee una fachada de estilo similar Tudor Inglés, sobre el frente se encuentra construida una casona de dos plantas con varios ambientes con vista a la calle 43. En el año 1982 los hermanos Costamagna, concretaron el proyecto El Teatro, construido con un diseño poco tradicional con una superficie de aproximadamente 1000 m2 cubiertos, de los cuales la sala ocupa 700 m2. 


Se incorporó al circuito con obras de teatro y espectáculos musicales, albergo obras que provenían del recientemente incendiado Teatro Argentino de La Plata. Al poco tiempo se comenzaron a realizar recitales de rock, pasaron consagrados artistas del ámbito nacional e internacional, fue sede de históricos boliches bailables de moda de la ciudad donde muchos platenses lo recuerdan como lugar emblemático de las salidas de aquellas épocas. La actividad desarrollada en esos años produjo un importante deterioro de la propiedad que, sumado al paso del tiempo y la problemática en materia de seguridad e impacto ambiental, entre otras situaciones complicadas, derivo en el cierre de la sala que permaneció sin actividad por un tiempo muy prolongado.
 
"En el año 2007, presentamos un plan de trabajo y un proyecto de recuperación al Ing. don Carlos Costamagna, un hombre sencillo de buen carácter, no muy convencido de que pudiéramos lograr el objetivo de reinserción y lograr las habilitaciones y permisos necesarios, por conocer lo difícil y costoso que era el camino, pero nos acompañó en el proceso y comenzamos a transitar el complicado camino de reconstrucción y puesta en valor de la sala. Asumimos el desafío de generar un espacio para la comunidad en general tratando de apostar a las más variadas propuestas artísticas y culturales, con un formato de café concert bien definido y tratando de defender ese concepto. En poco tiempo El Teatro Bar, se instaló en la ciudad como el lugar elegido por los platenses a la hora de disfrutar un espectáculo. Nos fuimos consolidando con propuestas de espectáculos de todos los estilos y Para todos los públicos, nos incorporamos al circuito artístico rápidamente."


"En el año 2010, nos entusiasmamos con un nuevo desafío. Nos reunimos con la comisión directiva del Club Max Nordeau y rápidamente consensuamos el proyecto de puesta en valor y recuperación del Teatro Opera de La Plata, llegamos a un acuerdo de concesión por varios años y decidimos realizar la reapertura del El Teatro Opera, otro histórico Teatro platense de muchos años sin actividad. Con la misma idea de concepto y trabajo realizamos la difícil puesta en valor de la sala y la totalidad de áreas de servicios, realizamos las inversiones, tramitamos las habilitaciones y permisos, generamos una cartelera con actividad constante y variada, incorporamos a la ciudad una sala con importantes recursos en materia de infraestructura, seguridad, técnica y servicios que sin dudas el público cuida, disfruta y valora."

"Hoy en octubre del año 2016, en la ciudad de La Plata, existe una empresa de espectáculos denominada El Teatro Bar La Plata, que cuenta con dos salas reconocidas en todo el circuito artístico del país, que produce un importante porcentaje de las propuestas que presenta, que se ganó el respeto y la confianza de artistas, productores y público, que se consolida como un proyecto social, cultural y recreativo único en la ciudad, con recursos e ideas genuinas platenses, que apostamos siempre a recuperar el patrimonio histórico de la ciudad y transitamos un camino de trabajo intenso y difícil para lograr ir consolidando nuestra empresa."

"Pasan por ambas salas aproximadamente 350 espectáculos cada año, generamos muchos convenios con instituciones y apostamos a la creación de un centro cultural amplio abierto a todas las expresiones artísticas y culturales.ª

"La confianza que deposita en nosotros nuestro público, los artistas y productores forman parte del mayor capital con el que contamos y como desde un principio sabemos que nos van a seguir acompañando."

 

sábado, 29 de octubre de 2016

Sobre el escenario, 173 años de teatro

“Príncipe Azul”, de Eugenio Griffero, es la obra que, a los 86 y 87 años, respectivamente, los vuelve a unir sobre las tablas. Dos maestros de la actuación y de la vida

Por MARIA VIRGINIA BRUNO


Una perla de la agenda cultural platense es esta versión de “Príncipe Azul”, la pieza de Eugenio Griffero que Norberto Barruti adaptó y dirige los domingos a las 19 en el Taller de Teatro de la UNLP. En escena, además de una conmovedora historia de amor frustrado, hay dos actores de peso que, a los 86 y 87 años, demuestran que la pasión por el teatro no se pasa con el tiempo. Nico Strático y Roberto Conte son, en sí mismos, una celebración de la vida y de la actuación.

Llevan más de siete décadas arriba de los escenarios. Por eso decidieron trastocar un poquito la historia que Griffero escribió allá por aquellos años oscuros, en 1982, en el marco del movimiento conocido como Teatro Abierto; una historia arriesgada para la época que plantea una relación de amor homosexual, de dos adolescentes que prometen reencontrarse 50 años después para ver qué les ha deparado el destino.

Hace años que Roberto Conte dice “ésta es la última obra que hacemos”. Sin embargo, como una especie de Mirtha Legrand, y afortunadamente, la rueda sigue girando. “Pero lo cierto es que uno está más cerca del arpa que de la guitarra… Ya estoy un poco cansado. Hago teatro desde hace setenta años. Tal es así que la edad que le hemos puesto a los personajes, son la edad real que tenemos. No necesitamos maquilladores. Estamos justo”, revela, entre risas.

“El amor pareciera tener cada vez más corta vida, quizás porque el hombre tiene cada vez más larga vida”

“Cuando uno se llega a enfermar de teatro, si se enferma de verdad, se enferma hasta las últimas consecuencias. No tiene cura. Yo me doy cuenta que no tengo cura. Nací y moriré en el escenario, que es lo que siempre quise hacer. Lamentablemente, no pude ser siempre actor. Porque uno es uno y sus circunstancias, y las circunstancias a veces pueden más que uno en la vida”, relata Conte, quien se recibió de doctor en Química, y dirigió grupos e instituciones locales y provinciales, entre ellas, al grupo de teatro del Colegio de Abogados con el que lleva 30 años de trabajo.

Del otro lado está Nico. Simpático, como su personaje en escena. El se define como un actor popular. Y viaja a sus inicios. “Empecé teatro de muy joven, con los versos de Gagliardi. Después me fui mejorando y entré al Conservatorio de Música y Arte Escénico, que era profesora Milagros de la Vega y el marido Carlos Perelli. Siempre estuve en el teatro. Fui casi fundador de la Comedia de la Provincia, y también de la Comedia Municipal”, enumera Strático, sentado en un silloncito de la Biblioteca Alberto Mediza donde, más allá, se encuentra la sala teatral a la que mañana volverán a encantar con su oficio.

Los años dorados de Nico parecen estar clavados en la época en la que junto al elenco de la Comedia recorrían los pueblitos en una carpa llevando el teatro. P orque si Mahoma no va a la montaña, entonces, que la montaña vaya a Mahoma. Antes, por lo menos, era así. “¡Pero sabés lo que era esa carpa, piba! ¡No te lo podés imaginar! Fue una experiencia bárbara. Igual que el tren cultural, con el que recorrí casi toda la provincia: durmiendo en el tren, comiendo en el tren y haciendo las obras en el tren. Venían los alumnos de los colegios de los pueblitos. Primero le hacíamos la obra, y después le dábamos un chocolate. El tren era el dormitorio, un comedor y el teatro. ¡Vos no sabés qué lindo fue eso, piba!”, cuenta, nostálgico.

Porque la realidad, ahora, es muy diferente. “Ya no está eso, se ha perdido todo. Antes era el teatro para el pueblo, por el pueblo y con el pueblo. Ahora está solo el teatro para el escenario y el público”, reflexiona Conte, santafesino de origen pero platense por adopción.

Hace décadas que Nico y Roberto se conocen. Han protagonizado juntos infinidad de obras. De hecho, en 2010, ya habían encabezado “Príncipe Azul”, una obra que, asegura Conte, conoció “de viejo” aunque, aclara: “Uno nunca sabe cuándo es viejo y cuándo es joven”. Es una cuestión de actitud, sostiene.

La versión que protagonizan ahora de la pieza del también psicoanalista Griffero -que de alguna forma habla de los fracasos en los que incurrimos cuando, por miedo o prejuicio, no perseguimos nuestros deseos- tiene algunas modificaciones. Por ejemplo, una especie de radioteatro y un apuntador que está ahí, al pie del cañón, muy armónico con la puesta. Estas modificaciones los tenían ansiosos. “No sabíamos si iban a gustar o no. Pero parece que anduvo muy bien”, remarca Roberto, en referencia al debut del domingo pasado, con una sala llena, que los aplaudió de principio a final.

La incertidumbre también invadió a Nico, quien, en la obra, le da vida a un actor, a diferencia del papel de juez de su compañero. “Esta última puesta, te digo la verdad, me dio muchos nervios. No estaba seguro si iba a poder decir el primer monólogo. Pero me quedé tranquilo cuando salí al escenario y la gente se reía. Ahí me sentí mejor”. Aunque, reflexiona: “La gente aplaudió mucho pero hay que reconocer que era toda gente conocida. Y eso no es un buen parámetro”. Dice Strático que se siente más cómodo con un público que no lo conozca para poder tener una referencia objetiva.

De todos modos, los dos, disfrutan el hecho de poder atravesar el tramo final de sus vidas haciendo lo que les gusta. “Yo creo que si bien el teatro no te cambia la vida, te ayuda a sobrellevarla, a vivirla. Y cuando vos tenés un cierto grado de curiosidad, algo indispensable para el teatro, te ayuda a analizar ciertas cosas”, remarca Conte.

Roberto, en este sentido, se anima a “analizar” y definir esta obra como una “historia de amor frustrado”. Y explica por qué. “Esta es una obra de amor. Y como todo amor, tiene dos posibilidades. O se realiza o se frustra. Y esta es una historia de amor frustrado. A los 16 años estos dos chicos varones vivieron un momento de amor. Tuvieron que abrirse, por razones de la vida, y quedaron en encontrarse setenta años después. Y se encontraron, y viven la experiencia de que el amor ya no existe. Que es una frustración de amor. No importa el sexo. Es una historia de amor frustrado. ¿Por qué no lo retomaron antes? Eso quedará para el público. Pero pareciera que el amor tiene como destino eterno la frustración. Son muy pocos los que duran más. El amor pareciera tener cada vez más corta vida, quizás porque el hombre tiene cada vez más larga vida. Así como nacemos para morir, también nacemos para fracasar en algunas cosas”. Interesante concepto.

Nico, por su parte, aporta sobre el oficio del actor, ese que lo llevó a vivir la experiencia desde otro lado, más terrenal y autodidacta, más en la calle que en la escuela. “Yo soy un actor chacarero, de no hablar mucho. Siempre digo: ‘habla poco, así no te conocen tanto’. Pero hay ciertas cosas del teatro, que a veces, no se cumplen. Se hablan pero no se cumplen”, dice Strático, anclado en las viejas formas de hacer y entender este arte, y rememorando con alegría aquellas formas caseras del oficio. Recuerda, por caso, cómo iluminaban antes la sala con “el motor de un tranvía que subía y bajaba las luces”.

“Yo soy un actor chacarero, de no hablar mucho. Siempre digo: ‘habla poco, así no te conocen tanto’

Nico elige quedarse con lo popular. “Yo no he tenido un estudio grande, no he llegado a una gran profundidad sobre autores. He estudiado, sí, pero sólo los autores de las obras que yo hice: viejos autores populares argentinos, como Vacarezza, por ejemplo. Y son obras que no se dan ahora. Pero ese es el teatro que me gusta a mí. Es lo que me llega. Lo que me gusta, y lo que me hace sentir vivo”.

Antagónicos tanto en escena como en la vida real, hablar con estos dos maestros de la actuación es un placer, y verlos actuar, otro. Una de esas perlas que no abundan, y que brillan con la candidez y la humildad de los grandes. Nico y Roberto, 173 años de teatro sobre el escenario.

Fuente: EL DIA

jueves, 6 de octubre de 2016

Octubre 2016 - Ciclo de Teatro Independiente de la ciudad de La Plata

 

Durante el mes de octubre de 2016 se realizará el Ciclo de Teatro Independiente en el Centro Cultural Pasaje Dardo Rocha de La Plata Provincia de Buenos Aires donde participarán diversos grupos de teatro la ciudad. 

Fuente: La Plata Ciudad Cultural

viernes, 30 de septiembre de 2016

La revoluta, de Diego de Miguel

Un trabajo magistral en el Viejo Almacén Obrero 

 “Todos los grandes hechos y personajes de la historia se repiten, por así decirlo, dos veces: (…) 
la primera vez como tragedia, la segunda como farsa”. 
Karl Marx, El 18 de brumario de L. Bonaparte.
Vale la pena para los platenses y los que no lo son, reservar entradas un sábado a las 20 horas en el Viejo Almacén Obrero de La Plata (13 y 71) para asistir a un verdadero festejo del teatro independiente.

La revoluta, con dramaturgia y dirección de Diego de Miguel, es un engranaje perfecto,  una farsa que nos conecta con las razones y sinrazones de nuestra historia y nos enfrenta a nuestras propias contradicciones.

La revoluta es más que una obra, es una experiencia teatral. Comienza cuando debemos bajar por una escalerita de madera empinada al sótano claustrofóbico del Viejo Almacén Obrero devenido en la sala más apta para esta obra, porque de repente nos hallamos como los personajes, en ese sótano en el que un grupo clandestino está esperando la llegada de su General desde el exilio para tomar el poder. ¿Cómo no pensar en la década del 70, entonces? Sin embargo, el General, como Godot se hará esperar. 

Los apagones que nos dejan indefensos ante tanta oscuridad, la iluminación precisa, la escenografía justa, el lirismo de la música, van marcando los saltos temporales, los momentos en esta pieza que funciona como espejo deformado de una historia conocida.

El texto impecable, plagado de ironía y paralelismos con la historia del siglo XX apela a la sensibilidad y a la inteligencia del espectador, pero también al corazón. Este texto preciso encuentra en las voces y los gestos de los cinco actores la amplificación que necesita.

A los que vayan a ver esta obra les sorprenderá encontrar tanto talento actoral, tanta magia, tanta calidad en un teatro independiente  de la capital de la Provincia. Como yo, no podrán más que irse agradecidos y maravillados de que el teatro esté más vivo que nunca, y no en una sala de la calle Corrientes sino en un Centro Cultural espectacular, movido por la pura pasión por el teatro que en estos meses está festejando de la mejor manera posible, con esta pieza exquisita, sus 20 años.

Para Diego de Miguel,  Vasco Andicoechea, Negro Cogo, Edgardo Desimone, Juan Felipe Hernandorena, Niem Nitai y Julieta Sargentoni, mis más sinceras felicitaciones.

Nos se la pierdan.

ELENCO: Vasco Andicoechea, Negro Cogo, Edgardo Desimone, Juan Felipe Hernandorena y Niem Nitai. ILUMINACIÓN: Negro Cogo. ESCENOGRAFÍA y VESTUARIO: Julieta Sargentoni. DRAMATURGIA y DIRECCIÓN: Diego de Miguel.

Sinopsis: En algún momento de la década de 1970, una logia clandestina planea tomar el poder. Su arma secreta: una máquina indestructible y un General en el exilio. Pero cuando la revoluta va a comenzar, una tragedia desencadena la farsa.

SÁBADOS 20 hs. - VIEJO ALMACÉN EL OBRERO, 13 y 71.
Reservas únicamente por teléfono al 451-9497, de lunes a viernes, de 15 a 19 hs. Espectáculo no recomendado para personas con movilidad reducida.

Fuente: https://razondelgusto.blogspot.com/

martes, 13 de septiembre de 2016

Historias de destierro

ESPECTÁCULOS | “LA VIAJERA DEL RIO”

VERÓNICA “PAMPA” GONZÁLEZ, EN UNA ESCENA DE “LA VIAJERA DEL RÍO”

“La Viajera del río”. Actuación: “Pampa” Verónica González. Vestuario y elementos escenográficos: Eugenia Kubli. Musicalización: Gustavo Vallejos y Daniel Gismondi. Fotografía: Belén Baiza. Gráfica e imagen: Molinve Taller. Dramaturgia y dirección: Gustavo “Tati” Vallejos. Sala 420, calle 42 entre 6 y 7.

El programa de mano adelanta lo que estamos por ver: “Basada en una historia real, que abarca tres generaciones: abuelos inmigrantes venidos de Yugoslavia, corridos por la Primera Guerra Mundial; padres que, exiliados por las dictaduras militares en Argentina, viajaron con sus hijas a Belgrado, ex Yugoslavia, y de allí a Trieste, Italia. Una hija que construye su vida, abrazando lo que cada tierra le da a su paso.”

Y “Pampa” Verónica González es esa abuela, esa, madre, esa nieta, su propia hermana, y todos nuestros antepasados, que bajaron de los barcos, en busca de una tierra que les ofreciera trabajo, pan y paz.

¿Cómo no identificarse con este viaje y esta viajera? Todos tenemos en nuestras familias alguien venido de allende los mares, con sus lenguas, sus costumbres, sus comidas, sus historias. Y acá nomás, testimonio de esa época, los frigoríficos Armour y Swift, en Berisso, en los que se deslomaban los recién llegados, en interminables jornadas de trabajo, para construirse un futuro.

Con escasos elementos –tres banderas, una silla, tres valijas-, la actriz canta, cuenta, vive y baila esas existencias errantes, trashumantes, de seres que huyen de persecuciones y muertes. Irónicamente, la misma tierra que los acoge generosamente, es la que años más tarde expulsa a hijos y nietos por cuestiones ideológicas y políticas. Y el miedo siempre presente, que obliga a partir, a huir, a abandonar la tierra de uno, el terruño, mutilándose al hacerlo.

La música juega un rol preponderante en esta nueva propuesta de Gustavo “Tati” Vallejos, y la actriz se luce a su compás, alternando palabras con danza, con su figura grácil, armoniosa, y un depurado lenguaje corporal. Sus gestos dicen más que sus parlamentos. Interactúa con ingenuidad con el público, que se presta tímidamente al juego.

Es muy probable que en las cabezas y corazones de muchos espectadores, surjan cálidos recuerdos de padres, abuelos, bisabuelos, tíos, vecinos; sus rostros, sus voces, sus dialectos, sus canciones, sus relatos, el aroma de sus cocinas. Y ése es el mayor mérito de esta suerte de homenaje a ellos, los que atravesaron océanos con inusitado coraje, con un destino incierto, jugándose el todo por el todo, en pos de la libertad. Paradójico que hoy, en pleno Siglo XXI, la historia se sigue repitiendo …

Verónica Pampa González llena la escena con su sola presencia. Es versátil, expresiva, y le sobran recursos para multiplicarse y mutar en sutiles transiciones. Transmite verdad. Dúctil, se pone al servicio de la historia que Vallejos quiere contar.

“La Viajera del río” nos trae a la memoria una bella canción del Indio Gasparino- Facundo Cabral: No soy de aquí, ni soy de allá; no tengo edad ni porvenir…

Al fin y al cabo, de eso se trata la vida. Un viaje.

Fuente: EL DIA

viernes, 26 de agosto de 2016

Poesía onírica en escena

ESPECTÁCULOS | “DIBUJADO EN LA ARENA”

Con su grupo “Buscalunas”, Olga Anzolini regresa a las tablas. Estrena mañana en el Teatro de Cámara de City Bell un proyecto sensible e interdisciplinario


Después de varios años alejada de la escena, la destacada directora, dramaturga, actriz y docente teatral platense Olga Anzolini, junto a su grupo “Buscalunas”, regresará este fin de semana a las tablas con “Dibujado en la arena”, una sensible propuesta que indaga en el cruce de géneros y que incluye, en el escenario, a una cantante y un arpista interpretando en vivo obras de Debussy.

La obra, que se estrenará mañana a las 20.30 en el Teatro de Cámara de City Bell, diagonal Urquiza entre 462 y 464, se presenta como una propuesta de naturaleza poética que es abordada, además de por el teatro y la música, por proyecciones de lenguaje multimedial, aunque también presenta danza y danza aérea.

El diálogo de lenguajes no es nuevo para el grupo. En su última propuesta, “Como si fuera un murmullo” (2008), una versión libre de “Pedro Páramo” de Juan Rulfo, estrenada también en City Bell, ya había incursionado en esta búsqueda estética, “una zona límite que no es ópera pero tampoco comedia musical”. Incluso antes, en 2006, “Sobre el pecho de una mujer” -ofrecido en La Hermandad del Princesa- incluyó música en vivo a cargo de la violonchelista Marina Arreseygor y la pianista Natalia Salinas.

En este sentido, y consultada por la decisión de volver a echar mano a este recurso cada vez más abordado, Anzolini explicó en diálogo con EL DIA que su idea fue ser fiel, como directora, al modo en el que se iban presentando las imágenes en el momento de su escritura. “El eje siempre es lo teatral. ´Sonaba’ en arpa y voz, una voz hipnótica. Y allí estaba Debussy. Hay danza para contar la Luna, para contar el amor. Es una apuesta de riesgo estético, asumida a la vez por actores, bailarines, músicos, un realizador audiovisual, una escenógrafa y vestuarista, maquilladora e iluminador”, manifestó.

“Dibujado sobre la arena”, que fue seleccionada por el Fondo Nacional de las Artes para la obtención de una beca de investigación que indague en la “búsqueda de teatralidad a partir de textos poéticos propios”, implica para su directora todo un desafío, el que están entusiasmados por encarar a partir de mañana.

“Emoción, sensualidad, una fantasía doliente”, son las claves que Anzolini trató de plasmar en su criatura, a la que definió como “una atmósfera de sueño atravesada por una realidad triste”.

En la obra, “hay una sirena de extraña belleza y mirada frágil. Y hay una mujer que sueña y sufre y se alivia soñando distancias y cielos abiertos. Es la soledad, la imposibilidad del amor, el deseo, la fragilidad del instante. Una voz sensual que puede transformarse en un grito desgarrador”, anticipó.

Una sirena que sueña amar como una mujer, y una mujer que quiere ser sirena forman parte de la onírica trama de “Dibujado en la arena”, un relato que habla quizá del “deseo o apetencia insatisfecha, que no puede saciarse en el dolor inacabable. Mujer y sirena, entre lágrimas erráticas, ensayan definiciones sobre el amor, sobre los recuerdos, se preguntan dónde se les quedó el deseo”, remarcó la artista.

Anzolini estuvo alejada de la escena por su tarea como directora de la Escuela de Educación Estética N°1, de donde se jubiló el año pasado. En relación a cuáles fueron los motivos que la llevaron a regresar, la dramaturga dijo que fue esa “misma necesidad de siempre, de crear mundos, de contar historias en diferentes claves, de darle cauce a esa energía y sensibilidad arrolladoras que tenemos. La necesidad de juntarnos con otros para interrogarnos, explorar textos, ideas insospechadas”.

“Plena y feliz” por volver al ruedo de la mano de un “grupo maravilloso”, Anzolini se refirió al desafío de la escena actual. “Hacer teatro independiente hoy significa dar batalla, significa luchar”, dijo y citó a uno de sus poetas preferidos, Juan Gelman, para concluir con una reflexión: “La poesía (y el arte en general) es un acto de resistencia contra el envilecimiento de estos tiempos”.

“Dibujado en la arena” incluye las participaciones de Laura Melgar en el diseño y realización de escenografía y vestuario; Jerónimo Carranza en realización multimedial; Carolina Ortega en canto; Mercedes Bralo Cisternas en arpa; Constanza Mosetti en el personaje principal; Horacio Yue Castelli ; María Clara Rodríguez en danza aérea; El niño Martín Ortiz en actuación; y Máximo Panizza en iluminación.

Fuente: EL DIA

jueves, 25 de agosto de 2016

El teatro independiente, de luto

ESPECTÁCULOS | MURIÓ JUAN CARLOS DE BARRY

Actor y director, fundó La Lechuza en tiempos de golpes militares y resistió con su grupo teatral al margen hasta la actualidad

El elenco de “Extramatrimonial”, con De Barry enmarcado junto a Wagner Mautone, Lidia Pérez Losavio e Irene Bianchi

Juan Carlos De Barry, fallecido el pasado martes, es un nombre insoslayable a la hora de hablar de teatro independiente en La Plata. La historia de su Teatro La Lechuza y la suya son indisolubles: las tablas que hoy tienen su lugar en 58 y 10 nació fue creación de juventud y producto de la perseverancia de De Barry, quien junto a Juan Carlos Canedo y Aldo Tulián decidieron erigir el teatro en 1957, tras el cierre del “Teatro Experimental de la Provincia de Buenos Aires” que funcionaba en el Teatro Argentino.

Sería sólo la primera de las rebeldías del grupo que inició la fortísima tradición teatral independiente que hoy existe en la Ciudad: Asíalquilaron un sótano en 54 entre 12 y 13, donde comenzaron las primeras reuniones y ensayos, “donde se empezó a preparar ‘El Centroforward murió al amanecer” de Agustín Cuzzani y se invita a cubrir un papel a Lisandro Selva. Esa obra para nosotros murió al amanecer porque no se llegó a estrenar. Así fue como Silva propone dirigirnos y al poco tiempo se convirtió en el más importante director de teatro independiente”.

Enterados de la existencia de un sótano en 7 y 45, De Barry logró convencer a los dueños de alquilarlo “con el apoyo de muchos comerciantes pudimos ponerlo en condiciones y así fue como cristalizamos nuestro sueño. Con mucho esfuerzo en 1957 aparece ‘La Lechuza” ante el público con ‘Legítima Defensa’ de Paolo Levi, y en ese momento estábamos muy lejos de suponer la repercusión que acompañaría al elenco. Realizábamos siete funciones semanales, cinco para adultos y dos para niños y la afluencia de público hizo ue al poner en escena nuestra tercer obra ‘Té y simpatía’, las instalaciones del teatro ya eran nuestras”.

De Barry contó a EL DIA que en 1957 “ocupábamos un subsuelo para ensayos en 54 entre 12 y 13, frente a la Catedral, y estábamos en la tarea de buscar un nombre al teatro, cuando pasó una lechuza y Lidia Pérez Losavio dijo ‘por qué no le ponemos la lechuza’. Todos dijimos que no porque en esa época la lechuza era sinónimo de mala suerte, pero al otro día, Juan Carlos Canedo trajo la moneda griega y nos dio una explicación sobre su significado: Sabiduría, Permanencia y Paz, desde entonces hasta hoy ese símbolo nos acompaña”.

La Lechuza se convertiría así en el grupo paradigmático del teatro independiente en tiempos de Revolución Libertadora, deserciones masivas de actores y cierre de sedes. La Lechuza resistió a los embates que la realidad asestaba por aquellos tiempos a los artistas y, con De Barry y su tesón al frente, resistiría hasta 1977 en aquella sede. Sin embargo, en aquel año, en plena Dictadura, la sala fue clausurada y el grupo pasó a realizar, desde entonces, esporádicas presentaciones hasta que, en 1990, se dio lo que llamaron “el milagro”: una inmobiliaria de la ciudad, cuyo dueño era amigo del grupo, les entregó una vieja casa en 10 y 58, en donde actualmente funciona el teatro​.

Fuente: EL DIA

miércoles, 24 de agosto de 2016

Diálogos Audiovisuales con Mariela Anastasio y Patricia Ríos (julio 2016)


DIÁLOGOS AUDIOVISUALES 3

Plataforma de Teatro Performático - Los DIÁLOGOS AUDIOVISUALES son diálogos en registro audiovisual - con difusión en la página web de la P.T.P.-, en los que participan dos invitados/as con actividad en el mismo campo o disciplina artística, y en el que cada uno/a responde a preguntas que serán editadas a modo de diálogo.

Invitadas: Mariela Anastasio y Patricia Ríos

Cámara y edición: J. Hernán Arrese Igor

Entrevistan: Carolina Donnantuoni y Gustavo Radice


Mariela Anastasio

Es escritora, dramaturga, directora teatral y docente. Actriz, egresada de la E.T.L.P., Profesora de Comunicación Social, egresada de la UNLP. Se ha formado en Dramaturgia, desde el año 2000 hasta el 2012, con profesores particulares en La Plata y CABA. Docente en el Iser (La Plata) y en la Escuela de Arte de Berisso. Desde 2005 dicta clases de Escritura Creativa y de dramaturgia. Es directora y productora del Grupo de Teatro Topográfico, compañía teatral con la que ha estrenado diversas obras desde el año 2003, y con el que ha sido invitada a participar en numerosos festivales nacionales e internacionales (Colombia, Perú, Bolivia, El Salvador, Brasil, Venezuela y Ecuador). Fundadora del Grupo de Dramaturgia Platense – grupo de dramaturgos de la ciudad de La Plata, reunidos con el fin de difundir y reflexionar sobre la dramaturgia local - con quien organizó dos ediciones del Festival de Dramaturgia Platense (2012/13) y el “Primer Congreso Platense de Dramaturgia: Narrativas Latinoamericanas” (2014) en La Plata. Como dramaturga y directora ha estrenado una docena de obras en Argentina, y una en Venezuela. Ha sido reconocida con premios a nivel municipal y provincial. Reconocida con diversas menciones especiales en diferentes concursos literarios (Haroldo Conti 1998, Argenta 2000, Raíz Alternativa 2001, otras editoriales y concursos internacionales 2002, 2003, “Revista Axolotl”, “Gustave Flaubert” 2007, "La Barca de la Cultura" 2009) y ganadora del 1º Premio del IV Concurso Literario Nacional, organizado por la Biblioteca Popular Beck Herzog de Humbold, Santa Fe, por el cuento "Delia. Último día" (Septiembre 2013). En el año 2014, realiza la publicación de su primer libro de obras: "Miscelánea de obras dramáticas". Con el auspicio del INT y del CPTI. En el 2015, publica “No decir agua”, libro colectivo del Grupo de Dramaturgia junto a otros 6 autores platenses, con el apoyo del INT.

Patricia Ríos

Es actriz, dramaturga y directora teatral cuya actividad data de 1990. Se formó principalmente con Pompeyo Audivert, Daniel Veronese, Alejandro Tantanián, Omar Fantini, Federico León y Maricel Alvarez. Escribió varias obras entre las últimas: 1999; Mar de fondo, (“El teatro y la Historia”, 2007.), “Cuero de Chancho” escrita para la Comedia de la Provincia y publicada en 2014 en el primer volumen de Futura, Colección de Dramaturgia Platense seleccionada y dirigida por Jorge Dubatti y editada por Malisia y “La memoria es una ladrona” obra que estrenó en 2013 y cuenta con su actuación y co- dirección. Co-dirige el grupo La Fabriquera de la ciudad de La Plata, desde hace catorce años, con el cual realizó numerosas obras y eventos culturales. También forma parte del colectivo La Grieta.

Fuente: Plataforma de Teatro Performático

viernes, 12 de agosto de 2016

Teatro de la Comedia Municipal de La Plata - 2016

 

La Municipalidad de La Plata, a través de la Secretaría de Cultura y Educación, eligió las obras ganadoras del Concurso de la Comedia Municipal 2016 que se realizó en el Pasaje Dardo Rocha. La premiación se realizó tras las jornadas de teatro independiente que fueron abiertas a todo el público, con entrada libre y gratuita. 

De esta manera, con el objetivo de destacar las producciones locales, se presentaron doce obras que llegaron a la etapa final del certamen para buscar un lugar en la programación oficial de la temporada. La ceremonia estuvo encabezada por el Secretario de Cultura y Educación, Gustavo Silva; quien estuvo acompañado por el Director del Teatro Coliseo Podestá, Gastón Marioni, los integrantes del Jurado, y la Directora del área, Magdalena Cabassi.

El Jurado, que fue conformado por actores, directores, guionistas y dramaturgos, contó con la participación de Ana Padilla, Joaquín Bonet y Rubén Viani, quienes seleccionaron en el rubro adultos a las obras "Mujerpájaro"; "El fruto" y "Eppur si Muove". 

Del mismo modo, en el rubro infantil se eligieron las obras "Circo no está"; "El diario del capitán Arsenio"; "El gato en busca de botas... una aventura musical". Asimismo, la Municipalidad distinguió a las mejores Direcciones, música original, vestuario, escenografía e iluminación, entre otras categorías. 

 Fuente: 221RADIO, La Plata Ciudad Cultural

miércoles, 6 de julio de 2016

Charla abierta sobre la obra "Vincent y los cuervos"


Plataforma de Teatro Performático

ARQUEOLOGÍA DEL TEATRO PERFORMÁTICO PLATENSE III

CHARLA ABIERTA: "Vincent y los cuervos" (1983-1984) dirigida por Quico García en el Teatro del Bosque (1 y 60): “La estética de lo extracotidano como técnica performática en el teatro platense”

realizada el JUEVES 26 de mayo de 2016 – 19.30 hs.

en el Taller de Teatro de la UNLP, Calle 10 N° 1076 (e/ 54 y 55)

La charla abierta Vincent y los cuervos: “La estética de lo extracotidano como técnica performática en el teatro platense” se enmarca en el ciclo “Arqueología del Teatro Performático Platense” organizado por la Plataforma de Teatro Performático y tiene por objetivo bucear en las raíces de las nuevas tendencias teatrales de la ciudad de La Plata, además de ser también un espacio para la revalorización de la actividad de los artistas del quehacer teatral local.

Este ciclo de charlas propone crear un espacio de análisis y reconstrucción de obras emblemáticas de los años ´80 y ´90 de nuestra ciudad, concentrándose en su gestación y los procedimientos, influencias y técnicas que las habitaron partiendo de la idea de “resto”, de “lo que ha quedado” de cada obra en soporte audiovisual, escrito, fotográfico y/o registro periodístico, etc.

ACTIVIDAD ABIERTA Y GRATUITA

Actividad organizada por Plataforma de Teatro Performático (G. Radice/C. Donnantuoni)

Con el apoyo de: Instituto de Historia del Arte Argentino y Americano - Facultad de Bellas Artes – UNLP / Grupo de Estudios de Artes Escénicas del Instituto de Historia del Arte Argentino y Americano - Facultad de Bellas Artes - UNLP / Biblioteca Teatral “Alberto Mediza” / Taller de Teatro de la UNLP / Asociación Amigos del Taller de Teatro de la UNLP / CPTI / Cooperadora de la ETLP / Escuela de Teatro de La Plata

EL CICLO 2016 DE LA PLATAFORMA DE TEATRO PERFORMÁTICO CUENTA CON EL APOYO DEL INT.

Fuente: Plataforma de Teatro Performático

miércoles, 22 de junio de 2016

Premios y distinciones para el teatro platense

ESPECTÁCULOS | FESTIVAL EN EL PASAJE DARDO ROCHA

Se conocieron los ganadores del Concurso de la Comedia Municipal 2016

Escena de “Eppur si muove”, uno de los tres espectáculos para adultos que se verán durante la temporada en el Pasaje

Luego de tres jornadas en las que las artes escénicas fueron las grandes protagonistas, la Comedia Municipal dio a conocer ayer las obras ganadoras de su tradicional concurso, y cuyas propuestas se podrán ver durante el año en las Salas A y B del Pasaje Dardo Rocha, con entrada libre y gratuita.

Con el fin de ser parte de la programación de la temporada oficial, doce proyectos de teatro independiente local se dieron cita el fin de semana en el Pasaje Dardo Rocha, en un evento que mostró la amplia y variada producción escénica platense.

El jurado estuvo integrado por Ana Padilla -actriz, directora de teatro y docente-, Joaquín Bonet -director, dramaturgo, guionista y actor-, Rubén Viani -actor, director de teatro y docente- y eligió 3 obras infantiles y 3 obras de adultos, para formar parte de la programación estable de teatro de la Secretaría de Cultura, a lo largo del año.

Dentro del rubro infantil, los espectáculos seleccionados fueron “Circo no está”; “El diario del capitán Arsenio”; “El gato en busca de botas… una aventura musical”. Como obra suplente, se eligió a “Farenheit, la otra historia”.

En el rubro adultos, el jurado optó por “Mujerpájaro”; “El fruto”; “Eppur si Muove” y, como suplente, el espectáculo “Vangelina Rimenver y sus primas”.

Dentro de la distinciones, se destacaron los rubros:

Música original: Gonzalo Correa y Andrea Casaccio por el “Diario del capitán Arsenio”; Rigo Quesada por “El Gato en busca de botas… una aventura musical”; Lucas Caricato por “Mujerpájaro”.

Vestuario: Magali Salvatori por “Mujerpájaro” y Analía Seghezza por “El fruto”.

Escenografía: Santiago Culacciatti y Maria Eugenia Molinuevo por “Mujerpájaro” y Pierina Luiz por “El diario del capitán Arsenio”.

Iluminación: Estanislao Pedernera por “Isadora o la revolución de un cuerpo”; Santiago Culacciatti por “MujerPájaro” y Diego Biancotto por “El diario del capitán Arsenio”.

También se distinguieron las actuaciones de María Eugenia Molinuevo por “Mujerpájaro”; Gabriela Busechian por las obras “Tacto suplente” y “Circo no está”; Malena Rizzone por “Circo no está”; Anahí Carnevale por “Vangelina Rimember y sus primas”; Florencia Subietta y Julieta Mora por “El Fruto”; Mariano Sétola por “Odiseos”.

Además, se destacaron las interpretaciones de los actores Francisco Giacci por “Globo flotando contra el techo de un shopping”; Agustín Recondo por “Tacto suplente” y Fabio Prado González por “Eppur si muove”.

En dramaturgia se seleccionó a Patricia Suárez por el “El fruto”; Pablo Bernasconi por “El diario del capitán Arsenio” y Pablo Prado González por “Eppur si muove”.

En tanto, en lo que a dirección de espectáculos se refiere, se distinguió a Rafael Garzanitti por “El fruto” y Santiago Culacciatti por “Mujerpájaro”.

Fuente: EL DIA

Una celebración de teatro: un ciclo mostrará obras gratis durante toda la semana

  ESPECTÁCULOS | LA CARTELERA LOCAL “El teatro argentino celebra su público” realizará más de 650 funciones en todo el país. En La Plata, ob...