La Onda Expansiva

12.03.2011 | Se inaugura la 3º edición del Ciclo Concepto Cero, en Frankville (46 e/ 10 y 11)

Después de dos años de existencia, 18 fechas en su haber y más de cincuenta artistas que pasaron por el evento, la apuesta del Ciclo en esta nueva edición no es innovar sino seguir fiel al lema que los signó: siempre igual pero distinto. Esta contradicción que funciona como motor de la propuesta marca que en todas las fechas hay un solista y una banda en formato acústico, una muestra de artes visuales o fotografía, un dj y proyecciones, pero que las personas que transitan esos espacios son siempre distintas. Y aunque no tienen nada en común en conjunto forman eso que se denomina escena emergente. Como un caleidoscopio cada fecha del ciclo arroja una imagen diferente de lo que eso significa, propia de las cincuenta personas que ese día asistan al ciclo. Y en ese sentido es que se hace imposible establecer un solo Concepto que de cuenta de la dinámica móvil y expansiva de la escena.

En este sentido, la tercera edición trae una banda de Buenos Aires, La Perla Irregular; una platense Tirame un Centro, con dos exponentes de la ciudad, Le Villera musicalizando y la muestra de la ilustradora Lucía Delfino.

La perla de la noche

En estado de ebullición, La Perla Irregular llega por primera vez a La Plata a presentar su último disco Rafael editado el año pasado que ha recibido favorables críticas en diversos medios nacionales. Formada en el 2008, tras varios cambios de formación, actualmente forman parte del proyecto Ricardus Sanabria (bajo), Joel Bonelli (guitarra), Esteban Camejo (batería) y Pablo Vidal (voz y guitarra). Y han editado cinco trabajos en tres años, para sorpresa de la crítica especializada. El cantante Pablo Vidal repasa “tenemos 3 discos: La Perla Irregular (2008), La Novena Utopía (2009) y Rafael (2010). Y además tenemos un EP y un simple, ambos virtuales, El Nadir del Rock (2009) y De regreso a la fantasía (2010). Recomiendo a cualquier persona que quiera saber de que se trata LPI que ingrese por la puerta de La Novena Utopía, que es una buena síntesis de la propuesta del proyecto. Y luego, que se zambulla en Rafael, que es una versión más pop de su antecesor y un mecanismo de defensa ante la densidad en la que quedamos sumergidos. Luego que elija su propia aventura”.

En todas las reseñas de su nuevo disco y a la hora de definir de qué va el sonido de la banda se los remite a The Beatles y Spinetta, un halago que en cierta medida puede ser una gran responsabilidad. Sin embargo, Vidal dice que “The Beatles y Spinetta, obran en la música de la Perla de forma inconsciente y quizás se evidencie en algunos giros melódicos, la forma de encarar algunos arreglos y las estructuras formales de los temas. Pero también tenemos otras referencias no literales como el folclore, tango, la música clásica. Creo que las etiquetas son inevitables y deben ser tomadas con humor, ya que de lo que tratan, es sobre intentar explicar la música con palabras. Es una traducción de un leguaje a otro: siempre se va a perder algo en el medio”.

Al mismo tiempo que relativizan las etiquetas tampoco pretenden ser modernos y se permiten fusionar reminiscencias del beat, el rock de los setentas, el folk y hasta de la música clásica. Lo que a su entender los ubica dentro del “protorock argentino de última generación (‘de última’ puede leerse en varios sentidos)”.

La oportunidad de poner aprueba este cóctel en formato acústico, según Pablo “es un espacio para encontrarnos con la canción en su forma más cruda, despojándola de toda la parafernalia de arreglos que tanto nos gustan: solitaria a base de algunos acordes nerviosos y la poesía encarnada en la melodía. También de sacar a relucir la sensibilidad de los temas en su veta más intimista, a través de la guitarra acústica que aunque presente en los discos, jamás ha aparecido en los recitales eléctricos. Nunca lo había pensado, pero hay dos situaciones ideales para escuchar a La Perla: viajes (de todo tipo y extensión) y en la soledad del hogar a un alto nivel de volumen”.

Y la fecha del Hostel parece hecha a medida para entrar en el mundo de La Perla antes que sea más que un secreto a voces.

Fina Estampa

Desde la postal del ciclo ilustrada con un autorretrato, la artista Lucía Delfino nos invita a mirarla, escudriñarla intentando entender dónde es que esconde ese mundo tan colorido como animado que refleja en su dibujo. Según la artista “lo que nos pasa alrededor nos está generando cosas constantemente, así que inconcientemente es inevitable que mis dibujos estén influidos por mi mundo más próximo, ya sea mi familia, amigos, una discusión, un sentimiento. A diferencia de la fotografía analógica que también me encanta, el dibujo me permite agregarle ese surrealismo o irrealidad que en la foto no existe o no podría hacerlo. El material de la muestra es algo re personal que apareció este último tiempo y tiene que ver con el poder, el equilibrio, las relaciones, cosas que superan mi análisis pero que se presentan de a tres. Esta cantidad que surge constantemente de infinitas formas y es simbolizada mediante el triangulo”.

Esa capacidad de darle forma a lo que descubre del mundo lejos de ser un don sobrenatural apareció al borde de la mesa familiar. Cuenta Lucía que “desde que soy muy chica que me gusta dibujar, recuerdo que solía sentarme a copiar personajes de dibujos todo el tiempo buscando que me salieran idénticos o me dibujaba las piernas enteras mientras nos sentábamos con mi familia en la mesa a cenar. Era algo que me salía solo hasta que elegí el Bachillerato de Bellas Artes para meterme en profundidad con el dibujo, para empezar a tomarlo como una forma de ser mía”. Que la define aún mejor que su autorretrato.

Daniela Camezzana

Fuente: http://www.elargentino.com/nota-129843-medios-122-La-Onda-Expansiva.html