El presidente de Venezuela abraza a la anfitriona Florencia Saintout, decana de la Facultad de Periodismo.
En la UNLP30.03.2011 | Unas 8 mil personas aplaudieron al Presidente venezolano. Apoyo de personalidades
El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez, recibió ayer el premio Rodolfo Walsh en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social (FPyCS) de Universidad Nacional de La Plata (UNLP), en un multitudinario acto al que asistieron agrupaciones estudiantiles, organizaciones políticas y sociales, y en el que el mandatario caribeño convocó a profundizar el camino iniciado por el ex presidente Néstor Kirchner y proclamó a la presidenta Cristina Fernández como "la mujer que necesita la Argentina".
El líder habló sobre un escenario en el que estuvo acompañado por la decana Florencia Saintout, la Abuela de Plaza de Mayo Estela de Carlotto, las Madres Hebe de Bonafini y Adelina de Alaye, y la madre de Miguel Bru, Rosa Schonfeld. Además del galardón se llevó varios presentes, como una porción de tierra del suelo de las Islas Malvinas y el abrazo de las cerca de ocho mil personas que colmaron el parque sobre el que fue montado el escenario.
A las 18.37, Chávez llegó con el auto de la embajada al edificio de la FPyCS, ubicado en 63 y 113. A unos metros de distancia, separados del playón de la facultad por un alambre olímpico, las vallas y los muchachos de seguridad, una multitud de estudiantes, jóvenes, docentes, militantes y vecinos, esperaban por él.
Las banderas de las agrupaciones estudiantiles y de las organizaciones políticas y sociales flameaban en lo alto, por encima de la muchedumbre apostada frente al escenario, sobre el predio de la facultad de Exactas. A un costado, el edificio del Inifta estaba cubierto por una gran bandera del Movimiento Evita, y otras de la Juventud Sindical, la JP, Quebracho y de otros grupos.
Unos minutos antes habían llegado el candidato a intendente del kirchnerismo, Guido "Kibo" Carlotto, los intendentes de Ensenada Mario Secco y de Berisso, Enrique Slezack, quienes se ubicaron en el sector de los invitados, debajo del escenario, donde también se sentaron Madres de Plaza de Mayo, docentes y autoridades universitarias, y personalidades como el cineasta Tristán Bauer y la vicepresidenta del INADI, María Rachid.
Los grandes ausentes fueron el gobernador Daniel Scioli y el intendente de La Plata, Pablo Bruera, quien no asistió "por problemas de agenda", según dijo horas antes su jefe de gabinete, Santiago Martorelli.
Cuando el locutor anunció que el presidente estaba en el edificio, las ocho mil gargantas lo aclamaron: "Alerta, alerta que camina, la espada de Bolívar por América Latina". Subió apenas unos minutos después.
Sobre el escenario estaban también el ministro de educación bonaerense, Mario Oporto; el secretario de derechos humanos de la CGT, Julio Piumato; el referente del Movimiento Evita, Emilio Pérsico, la dirigente social y referente de la Tupac Amaru Milagro Sala, junto a los embajadores de Bolivia y de Cuba, Leonor Araujo y Jorge Lamadrid, respectivamente.
Antes de recibir el galardón de la facultad, Antonela Safora de la conducción del centro de estudiantes, agrupación Rodolfo Walsh, y Martín Cortez, de JUP, le regalaron remeras de sus organizaciones al presidente. El ex combatiente Ernesto Alonso, del Cecim, le obsequió al caribeño una porción de suelo de las Islas Malvinas. Luego, Chávez reclamaría la soberanía nacional sobre las islas.
Todo el acto fue transmitido en directo por Telesur, fundada por Chávez, señal que fue replicada por CN23 y C5N. Por la creación de esa cadena de televisión, entre otras medidas favorables para la comunicación popular, el mandatario fue distinguido con el premio en la categoría "Presidentes Latinoamericanos por la comunicación Popular".
Saintout entregó el premio y saludó "al presidente que ha hecho el sueño de una Patria grande, justa, libre y soberana". Luego le cedió la palabra al mandatario caribeño, quien fiel a su costumbre habló dos horas.
"Estoy sobrecogido por esta manifestación de afecto", dijo Chávez, y agradeció el premio "en nombre de mi pueblo de Venezuela, de Simón Bolívar, hermano de ustedes, que lucha contra el colonialismo económico y cultural, contra la dominación y la hegemonía capitalista y neoliberal".
Durante su oratoria interactuó continuamente con el público. "En esa anótenme: yo también soy soldado de Perón. Y somos los mismos soldados de San Martín y Bolívar", dijo el presidente a los jóvenes de La Cámpora, la JUP, la Walsh y otras agrupaciones peronistas que cantaban entre el público.
Pugnó por "el pensamiento libre y el pensamiento crítico", pilares "fundamentales para la democracia" y saludó a la Universidad de La Plata.
Pero no sólo habló. Chávez también cantó a capela el Himno Nacional argentino y unas estrofas de Alí Primera; además vivó al Che Guevara, a Perón, a Eva, a Bolívar y también a Néstor Kirchner y a Cristina.
Y recalcó que "fue Néstor el hombre que necesitó Argentina en ese momento de resurrección. Y creo que es Cristina la mujer que necesita ahora y por los años que vienen".
El presidente venezolano abandonó el edificio de 63 y 119 a las 21.30 rodeado de agentes de seguridad. Pero no pudieron evitar que a unos metros de la salida de la facultad obligara a su chofer a detenerse: se bajó a medias del coche y saludó a quienes lo despedían rodeándolo.
“Cristina es la mujer que necesita Argentina”
Premio Rodolfo Walsh
30.03.2011 | Lo aseguró el presidente de Venezuela, en un acto en el que reivindicó a Néstor y a Perón
Las horas previas a la llegada de Chávez a La Plata fueron de verdadero vértigo en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP.
El jueves pasado, tal como lo había anunciado en exclusiva Diagonales, la embajada le había comunicado a la decana de esa unidad académica, Florencia Saintuot, la aceptación del premio por parte del mandatario. En sólo seis días, una facultad de la universidad pública y gratuita tenía la distinción y, a la vez, la altísima responsabilidad de habilitar todos los mecanismos que impone el protocolo y la seguridad de cualquier presidente del planeta para que la recepción a Chávez no se viera obstaculizada por detalles formales.
Lo cierto es que, tras idas y vueltas (en algún momento la embajada venezolana sugirió un cambio de lugar para el acto), la comitiva de Chávez aceptó llevar adelante el acto de entrega del Premio Rodolfo Walsh al presidente en el predio casi suburbano de 63 y 119.
Esta es la segunda vez en tres años que la Facultad de Periodismo y Comunicación Social lleva hasta la puerta de su casa a un presidente. Ya en 2009 había hecho eso con Evo Morales, el jefe de Estado boliviano. Pero, en esa ocasión, el ámbito de la ceremonia se constituyó en la céntrica zona de la presidencia de la UNLP y contó con un auxilio institucional de la Casa de Estudios.
Finalmente, a las 18.43, Chávez llegó a la Facultad sin demasiada pompa, aunque con una numerosa escolta oficial y en un auto con vidrios polarizados.
Una multitud aguardaba la presencia del líder venezolano, quien dedicó el galardón "a todos los pueblos que luchan contra el colonialismo cultural" y que "trabaja por una comunicación libre de la dictadura mediática.
"Este reconocimiento no es para mí sino para el pueblo de Venezuela, el pueblo de (Simón) Bolívar, para los pueblos que luchan contra el colonialismo cultural y económico, contra la dominación, contra la hegemonía imperialista, neoliberal y capitalistas", dijo Chávez después de recibir el reconocimiento.
Fiel a su estilo, el presidente de Venezuela repartió elogios y reproches a siniestra y diestra, despertó clamores, aplausos y cánticos en un extenso y entretenido discurso.
En ese contexto, se refirió al fallecido Néstor Kirchner y recordó que cuando tomó posesión del gobierno "resucitó el pueblo argentino y se despertó un verdadero gigante".
"Nada viene de la nada, porque hasta hace unos años este continente, casi totalmente, yacía arrodillado ante los Estados Unidos", rememoró Chávez.
En otra parte de su alocución, Chávez aseguró, al referirse a Rodolfo Walsh que "él no murió como (Néstor) Kirchner o (Juan Domingo) Perón" y destacó que "los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos".
Asimismo, cuestionó que "el presidente (Barak) Obama sea premio Nobel de la Paz cuando abre guerras y atropella a países como Libia para quedarse con su petróleo".
"Paren esa masacre porque hay que respetar al pueblo de Libia y a sus soberanía", subrayó Chávez.
El locuaz presidente dedicó un espacio a la economía sudamericana y acuñó la idea de "crear un Banco del Sur" para "no estar más sometidos y cortar con el imperio".
"Hoy con Cristina Fernández de Kirchner hablamos de la necesidad de contar con un banco de nuestro pueblo para que no manejen nuestro dinero por la dictadura del dólar", remató.
Aseguró también que "Cristina (Fernández de Kirchner) es la mujer que necesita Argentina para asegurar el rumbo de la igualdad".
"Tenemos que multiplicar los abrazos de los hijos de Bolívar y San Martín en diferentes niveles y concretarlos en distintos proyectos como lo hizo Néstor Kirchner".
Chávez repasó todos los temas de interés para un público ávido de escucharlo.
También cantó, leyó párrafos de libros y de un mensaje de Fidel Castro, entonó el Himno nacional y rió en varias ocasiones de muy buena gana.
Afirmó que en Venezuela rige “plena libertad de crítica, plena libertad de pensamiento, plena libertad de expresión, sólo que a la burguesías les gusta imponer su voz, no les gusta oír la voz de los pueblos y nosotros, tanto (la presidenta argentina) Cristina como yo, representamos las voces de nuestro pueblo”.
El jueves pasado, tal como lo había anunciado en exclusiva Diagonales, la embajada le había comunicado a la decana de esa unidad académica, Florencia Saintuot, la aceptación del premio por parte del mandatario. En sólo seis días, una facultad de la universidad pública y gratuita tenía la distinción y, a la vez, la altísima responsabilidad de habilitar todos los mecanismos que impone el protocolo y la seguridad de cualquier presidente del planeta para que la recepción a Chávez no se viera obstaculizada por detalles formales.
Lo cierto es que, tras idas y vueltas (en algún momento la embajada venezolana sugirió un cambio de lugar para el acto), la comitiva de Chávez aceptó llevar adelante el acto de entrega del Premio Rodolfo Walsh al presidente en el predio casi suburbano de 63 y 119.
Esta es la segunda vez en tres años que la Facultad de Periodismo y Comunicación Social lleva hasta la puerta de su casa a un presidente. Ya en 2009 había hecho eso con Evo Morales, el jefe de Estado boliviano. Pero, en esa ocasión, el ámbito de la ceremonia se constituyó en la céntrica zona de la presidencia de la UNLP y contó con un auxilio institucional de la Casa de Estudios.
Finalmente, a las 18.43, Chávez llegó a la Facultad sin demasiada pompa, aunque con una numerosa escolta oficial y en un auto con vidrios polarizados.
Una multitud aguardaba la presencia del líder venezolano, quien dedicó el galardón "a todos los pueblos que luchan contra el colonialismo cultural" y que "trabaja por una comunicación libre de la dictadura mediática.
"Este reconocimiento no es para mí sino para el pueblo de Venezuela, el pueblo de (Simón) Bolívar, para los pueblos que luchan contra el colonialismo cultural y económico, contra la dominación, contra la hegemonía imperialista, neoliberal y capitalistas", dijo Chávez después de recibir el reconocimiento.
Fiel a su estilo, el presidente de Venezuela repartió elogios y reproches a siniestra y diestra, despertó clamores, aplausos y cánticos en un extenso y entretenido discurso.
En ese contexto, se refirió al fallecido Néstor Kirchner y recordó que cuando tomó posesión del gobierno "resucitó el pueblo argentino y se despertó un verdadero gigante".
"Nada viene de la nada, porque hasta hace unos años este continente, casi totalmente, yacía arrodillado ante los Estados Unidos", rememoró Chávez.
En otra parte de su alocución, Chávez aseguró, al referirse a Rodolfo Walsh que "él no murió como (Néstor) Kirchner o (Juan Domingo) Perón" y destacó que "los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos".
Asimismo, cuestionó que "el presidente (Barak) Obama sea premio Nobel de la Paz cuando abre guerras y atropella a países como Libia para quedarse con su petróleo".
"Paren esa masacre porque hay que respetar al pueblo de Libia y a sus soberanía", subrayó Chávez.
El locuaz presidente dedicó un espacio a la economía sudamericana y acuñó la idea de "crear un Banco del Sur" para "no estar más sometidos y cortar con el imperio".
"Hoy con Cristina Fernández de Kirchner hablamos de la necesidad de contar con un banco de nuestro pueblo para que no manejen nuestro dinero por la dictadura del dólar", remató.
Aseguró también que "Cristina (Fernández de Kirchner) es la mujer que necesita Argentina para asegurar el rumbo de la igualdad".
"Tenemos que multiplicar los abrazos de los hijos de Bolívar y San Martín en diferentes niveles y concretarlos en distintos proyectos como lo hizo Néstor Kirchner".
Chávez repasó todos los temas de interés para un público ávido de escucharlo.
También cantó, leyó párrafos de libros y de un mensaje de Fidel Castro, entonó el Himno nacional y rió en varias ocasiones de muy buena gana.
Afirmó que en Venezuela rige “plena libertad de crítica, plena libertad de pensamiento, plena libertad de expresión, sólo que a la burguesías les gusta imponer su voz, no les gusta oír la voz de los pueblos y nosotros, tanto (la presidenta argentina) Cristina como yo, representamos las voces de nuestro pueblo”.
Fuente: http://www.elargentino.com/nota-132197-medios-122-Ante-una-multitud-Hugo-Chavez-recibio-el-premio-Rodolfo-Walsh-en-Periodismo.html
http://www.elargentino.com/nota-132184-medios-122-Cristina-es-la-mujer-que-necesita-Argentina.html
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