“Tenemos que seguir capacitándonos para producir el cambio que necesita la sociedad”

Juan Carlos D’Amico, presidente del Instituto Cultural, durante el II Congreso Internacional de Cultura

Juan Carlos D’Amico

20.03.2011 |El Presidente del Instituto Cultural analiza el rumbo de la Provincia hacia la transformación social

Culminó el II Congreso Internacional de Cultura para la Transformación Social, organizado por el Instituto Cultural de la provincia de Buenos Aires. El evento se desarrolló del 17 al 19 de marzo en la ciudad de Mar del Plata. A lo largo de esas tres jornadas, secretarios y directores de cultura de toda la provincia, representantes de la sociedad civil y organismos no gubernamentales que trabajan en el ámbito de la cultura y responsables de programas culturales de América Latina y España, compartieron e intercambiaron análisis sobre las experiencias que realizan en sus países en pos de profundizar la relación entre los actores que apuestan a la cultura como motor de integración e igualdad.

Antes del cierre del mismo, el presidente del Instituto Cultural, Juan Carlos D’Amico, mantuvo una entrevista con Diagonales.

–¿Cuál fue el desafío al encarar este II Congreso Internacional de Cultura para la transformación social?

–El desafío fue justamente hacer este segundo Congreso, porque demuestra que es una continuidad en nuestro trabajo. Es un poco lo que estamos haciendo desde que asumimos, cuando el gobernador Daniel Scioli nos convocó a Sebastián Berardi (Secretario Ejecutivo de la Provincia) y a mí para que tratemos de trabajar el tema de la inclusión social y de la construcción de ciudadanía a través del área de Cultura. Lo que tenemos que pensar es en estas cosas, porque cuando gestionás no pensás, pensaste cuando hacés el proyecto, y cuando estás gestionando estás con el problema diario. Este es el cuarto Congreso que hacemos, dos de Cultura y Transformación Social y dos Provinciales, entonces sirve para medir si lo que se habló en el primer Congreso fue declamativo o se hizo, y la pauta es que se hizo: hicimos los Centros de Producción Cultural, hicimos los Puntos de Cultural, estamos trabajando con Nación y con los municipios, y seguimos teniendo relación con todas las ONGs, a las cuales subsidiamos constantemente porque ellos ya tienen toda una estructura armada para poder llegar a la gente, que es el objetivo final. Progresamos en cumplir con lo que nos enseñó el primer Congreso y, ahora que tenemos los casos de experiencias, hay que ver cómo se potencian.

–¿Cómo se sigue avanzando en ese camino?

–Lo que queda claro es que el cambio es cultural, de eso estamos convencidos. Para hacer un cambio cultural hay que estar capacitado. Esta área, por sus características, permite mucho el guitarreo y la declamación. Si no estás formado es muy fácil decir quiero hacer un Programa de Transformación Social y no tenés los elementos o las herramientas para poder hacerlo. Tenemos que seguir capacitándonos para producir el cambio que necesita la sociedad.

–¿Y cómo se hace para vencer las ansiedades, ya que los cambios culturales se ven a largo plazo?

–Esto te lo enseña la política, no te lo enseña la universidad. Yo me formé, toda mi vida fui un gestor cultural, me puedo considerar un técnico, y la política me enseñó que hay que producir dos cosas simultáneas: cuando uno está en política y se debe a su gente y también al electorado y a su votos, uno tiene que pensar que tiene que tener soluciones ya y soluciones a largo plazo. Así le pasa tanto al Gobernador como a los Intendentes. Entonces tenés que diferenciar lo inmediato, de las soluciones a mediano y a largo plazo. Tenés que trabajar con las cosas mediáticas pero con contenido, como la programación de verano que hicimos con shows de calidad libres y gratuitos, el Programa Mil Guitarras, el espectáculo Darse Cuenta, teatro y reflexión, que producen un movimiento cultural inmediato. Eso no cambia a la gente a largo plazo, lo que la cambia es el contenido. Si hago un programa masivo de Cultura, como hicimos con el personaje de Mafalda al declarar a la Provincia en estado público de lectura, produce inmediatamente un efecto grande pero no puedo decir que a fin de año leyeron cien mil chicos más, no lo sé. Pero si sé que si esta política se mantiene a largo plazo va a haber más cantidad de lectores, porque hay un programa de lectura pensado y con continuidad. Los efectos de cambio cultural profundo se logran con el tiempo. Es como la democracia, que aparece en 1983 pero todavía tiene patas débiles que fortalecer. En la democracia el derecho es para todos y sabemos que hay mucha gente que no pertenece al sistema. El Estado tiene la obligación de darle los elementos a la gente para que tengan todos las mismas posibilidades.

Fuente: http://www.elargentino.com/nota-130905-Tenemos-que-seguir-capacitandonos-para-producir-el-cambio-que-necesita-la-sociedad.html