martes, 27 de julio de 2010

“Giulio Cesare” peronista y musicalmente impecable

Martes 27 de Julio de 2010

La mezzo Nidia Palacios, mostró una coloratura perfecta como Giulio Cesare, y Paula Almerares obtuvo la mayor ovación por su caracterización de una Cleopatra fusionada con Eva Duarte en la versión del Argentino de La Plata.


Por: Margarita Pollini

La ópera más popular de Georg Friedrich HTMndel, «Giulio Cesare in Egitto», desembarcó por primera vez en el Teatro Argentino de La Plata con una superproducción íntegramente realizada en sus talleres y un elenco de primer nivel. Se sabe que la contratación de una orquesta de instrumentos antiguos puede exceder ciertos presupuestos, pero la institución que dirige Marcelo Lombardero encontró una solución inteligente: poner al frente de la Estable a un profundo conocedor de ese período, el argentino Facundo Agudín, perfeccionado y radicado en Suiza, quien sumó un continuo de especialistas y trabajó minuciosamente para lograr una versión musical impecable.

La puesta, en cambio, estuvo lejos de convencer merced a una innovación parcial no totalmente integrada a la estética barroca planteada por él y brillantemente llevada a cabo por el escenógrafo Daniel Bianco, el vestuarista Jesús Ruiz y los artesanos platenses. El poder (y sus laberintos) es indudablemente el gran tema de la ópera seria, y «Giulio Cesare» no es la excepción: su argumento lleva a escena el conflicto del romano en su desembarco egipcio por la pasión que despierta en él la joven y ambiciosa Cleopatra, quien junto con su hermano Ptolomeo gobierna esas tierras. En la versión de Gustavo Tambascio hay una fusión de la figura de Cleopatra con la de Eva Duarte; es un toque de innegable originalidad, pero la idea no termina de cerrar y redunda en escenas que dejan al espectador entre pasmado y risueño, como la de Cleopatra emitiendo el voto femenino desde su diván de enferma o la Pirámide de Mayo de fondo con un niño a sus pies en la apoteosis final.

En el rol principal, la mezzo argentina Nidia Palacios mostró una coloratura perfecta y gran conocimiento del arte de HTMndel, pese a que su caudal se oyó algo escaso en una sala como el Argentino. Paula Almerares, verdadero ídolo local, se ganó la mayor ovación de la tarde por su caracterización de Cleopatra, papel muy apropiado para su voz y su agilidad. El increíble contratenor español Flavio Oliver dio una lección de canto barroco y realizó un despliegue físico notable como Ptolomeo, mientras que Adriana Mastrangelo brilló en una encarnación conmovedora de Sexto, al lado del cual la Cornelia de Cecilia Díaz quedó apagada y vocalmente anticuada, aunque con buen trabajo actoral. El resto del elenco y el Coro Estable, esta vez fuera de escena, cumplieron a la perfección.

Algunos minutos después de las 20.25, hora en que Eva Perón entró en la inmortalidad, y en la víspera del 58° aniversario de este acontecimiento, finalizó el estreno de una producción que posiblemente entusiasme a autoridades nacionales y provinciales.

«Giulio Cesare in Egitto», ópera en tres actos de G. F. HTMnLibreto: N. F. Haym. Orq. y Coro del Teatro Argentino. Puesta en esc: G. Tambascio. Dir. Mus.: F. Agudín (Teatro Argentino, 25/7).

Fuente: http://www.ambito.com/diario/noticia.asp?id=534124

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