Recalculando
OFF, el suplementos de los teatros
29.10.2011 | Con nueva formación, el grupo Ridiculum Vitae estrenó espectáculo pero conserva la magia del humor musicado que los caracterizó desde el origen
Con nueva formación, el grupo Ridiculum Vitae estrenó espectáculo pero conserva la magia del humor musicado que los caracterizó desde el origen
Como en una mesa de un bar o como en una ronda de mates, la conversación que mantienen los cuatro hombres es una típica charla de amigos. Chistes, anécdotas, comentarios personales… Dos de ellos están sentados en el escenario y los otros dos en las butacas de la primera fila del lugar. Un quinto que se acopla y no altera para nada la atmósfera, todo lo contrario.
Los involucrados: Nicolás Ciocchini, Juan Pablo Piscitelli, Pablo de la Fuente y Diego Larraggione, del grupo Ridiculum Vitae (más Guillermo Leguizamón, asistente de dirección y técnico). El lugar: la Sociedad Odontológica (13 e/ 45 y 46). El motivo del encuentro: la antesala de la presentación del espectáculo Recalculando.
Con el impulso de celebrar los 11 años desde el nacimiento de la agrupación y debido a algunos cambios en la formación (Nicolás Allegro, del trío original, “siguió por otro lado sin que haya habido un problema, sólo porque tuvo otros proyectos”) este show marca una nueva etapa pero, ya desde los preparativos, se palpita que la esencia es la misma de siempre.
“Ahora somos dos viejitos y dos nuevos”, comienza a contar Diego Larraggione, que revela que las incorporaciones (Ciocchini y Piscitelli) son viejos conocidos, ya que la dupla que llegó cursaba en la Facultad de Bellas Artes, el espacio donde se creó Ridiculum. A raíz de esto la ocurrencia fue, además de repasar toda la trayectoria del conjunto (con encuesta entre los espectadores incluida para elegir los mejores sketches) agregar cuadros nuevos, a modo de bienvenida para los compañeros que se sumaron al proyecto.
¿Se podría hablar de una “refundación”? Casi con seguridad que no, más bien lo que atraviesa el grupo es un momento de “cambio” (aunque a la vista todo parece en su lugar y cual máquina efectiva, todas las piezas funcionan a la perfección). Lo destacable es que los recién llegados (en febrero se iniciaron los ensayos del nuevo show) además de ser amigos eran fans y conocían la historia de Ridiculum: “Lo que surge ahora es una mirada distinta de cada cosa que hacemos, porque si bien muchos de los textos son originales, tienen la mirada del nuevo grupo. Se dio una cosa piola: del respeto a la historia del grupo pero tenemos ganas de escuchar sus opiniones y propuestas del material. Hay un mix: lo tradicional del estilo del grupo y los aportes que hacen los nuevos integrantes. Porque históricamente en el grupo lo que ha ocurrido fue una combinación de los humores de cada uno y esta nueva mezcla está creciendo rápidamente, viene muy bien”, comenta Diego Larraggione.
Preparativos
Poco tiempo le requirió al cuarteto armar la nueva obra. Ellos argumentan que fue por la simple causa de que ya había cosas hechas, pero la química que se percibe, la conexión real entre ellos es, seguramente, el verdadero motivo del veloz proceso: “el trabajo fue de adaptación a la nueva agrupación”, aunque igualmente se tomaron “su tiempo” para que todo quede perfecto para presentar. Los chicos son “bastante quisquillosos”.
El claro ejemplo de la dedicación y el profesionalismo es la anticipación con la cual acuden al teatro: 3 horas antes de la función están ahí, porque además toda la producción está a su cargo. Llegan a las 18, arman las luces, prueban sonido, vocalizan, afinan, toman mate y comen torta. También organizan el tema de las entradas anticipadas (para esto colaboran Julieta, Martina y Gabi).
Los muchachos están en todos los detalles: les interesa la comodidad del público, por eso llevan un equipo de música que instalan en la antesala, para que la espera previa a la función resulte más amena.
En ningún momento el clima distendido se modifica: tranquilidad, nada de apuro y frases a medio terminar (las risas impiden que alguno complete lo que intentaba decir). Los chistes abundan y, entre medio, algún repaso de un cuadro que en breve interpretarán. Ensayan, pero prácticamente no hay nada por ensayar, todo está en el lugar que debe estar.
De último momento
“¿Si nos cambiamos, por ejemplo? Ya son 20.30”, propone uno de los Diegos. Los otros asienten pero al notar que hay una espectadora no habitual que observa sus movimientos previos a salir a escena, agregan: “Si nos cambiamos ella no puede ver nada”. “Yo prefiero que no vea nada…” y otra vez las risas.
Al final no se cambian nada, deciden grabar el “spot” de “Orteche, el candidato de la gente” (uno de los personajes del show que está a punto de comenzar). La decisión conjunta de grabar y después vestirse ganó, por eso piden silencio (algunas de las esposas de los integrantes del grupo se hicieron presentes en el lugar). Repiten la grabación del spot (“ahí salió mejor, muy lindo che, fantástico”) y la próxima aparición será con los trajes: pantalón negro, camisa blanca y moño rojo.
Cuando el reloj marca que faltan 20 minutos para comenzar el espectáculo, se realiza una nueva prueba de luces, sin el cuarteto presente (todavía están detrás del escenario, acomodando los instrumentos). Ingresa a la sala una mujer y pregunta si alguno tiene cambio (“hay mucha gente y todos pagan con 100”) y tras dar respuesta al pedido, se acomodan para la sesión de fotos.
–¿Hacemos la formación clásica? ¿Miramos para acá, miramos para allá?
–Hagan algo gracioso -pide el fotógrafo y ellos, una vez más, cumplen con la demanda.
Se ve antes, y se confirma una vez que arranca la función: con los Ridiculum todo funciona.
Dispuestos a reír
Apenas pasadas las 21 dan sala. La gente, sea por comentarios o porque ya sabe lo que vendrá, entra con emoción. Ya están acomodados en las butacas y una voz en off anuncia el “comienzo de espacio publicitario” que es ocupado por “Yerba mate Flor Celeste, el clásico mañanero”, y ya arrancan las risas.
Se encienden las luces e ingresan a escena los que, se podría decir, son los integrantes “originales” (Pablo de la Fuente y Diego Larraggione). Buscan algo, y en breve entran los dos “nuevos” (Nicolás Ciocchini y Juan Pablo Piscitelli). El encuentro marca el saludo a los espectadores, a quienes se les da la bienvenida con una canción alusiva: “comienza una nueva era, con ritmo y mucho sabor”, porque Ridiculum “se renueva” con Recalculando.
A partir del momento en que los cuatro dicen “Buenas noches platea”, habrá que tener presente que las risas no se detendrán. Con sketches ágiles, humor musicado y juegos de palabras (un sello de la agrupación) el espectáculo va transitando por distintos pasajes: recuerdos y homenajes a los grandes del tango, publicidades, la presentación del candidato Orteche y mucho pero mucho más.
Las descripciones y enumeraciones no están de más, pero no llegarían nunca a alcanzar lo que significa ver el show en vivo, porque Recalculando es una pieza para presenciar y disfrutar hasta escuchar el “Buenas noches platea”.
[El Dato]
Recalculando se presentará mañana a las 21, en la Sociedad Odontológica (13 e/ 45 y 46) y continuará durante todos los domingos del mes de noviembre. El espectáculo será a modo de festejo por los 11 años de trayectoria del grupo Ridiculum Vitae (que en la actualidad está conformado por Nicolás Ciocchini, Juan Pablo Piscitelli, Pablo de la Fuente y Diego Larraggione).
Una aproximación a la obra desde la obra
La antesala de la presentación del espectáculo Recalculando
Fragmento de Historias de Flor celeste
Comienzo de espacio publicitario
(Música)
Flor celeste… la yerba con palo te cuenta una historia de amor…
– Te cuento mi historia de amor con una amiga, compañera de trabajo. Yo buscaba algo serio y entre mate y mate, un día, le volqué uno recién cebado y bueno para resarcirme la invite a cenar. Ella era perfecta: pelo por acá, su altura normal, su cuerpo robusto, enorme y lleno de amor para dar y de energía para enfrentar la adversidad. Sus ojos se entrelazaban en direcciones opuestas creando una mirada que era entre desconcertante y seductora y su voz, grave potente retumbaba en mi corazón hasta hacerme estremecer.
La lleve a cenar a un lugar lindo, bien puesto. Yo estaba algo nervioso pero la cena paso muy amena. Cuando terminamos de cenar, habíamos tomado una copas y me animé, tome coraje, me le acerco y le digo: limpiate que tenés un orégano… ella se sonríe ¿no? …
Y ahí le digo negra… ¿qué te parece si vamos a un lugar mas tranquilo? Y ella me dice: Sí. Bárbaro...
Y bueno yo estaba ahí medio indeciso porque pensaba no sé si hay onda, por ahí me dijo que sí porque vive por acá... entonces me digo: lo dejo librado al azar.... si pasan dos autos blancos me tiro un lance. Y fijate lo que son las cosas, podes creer que pasaron dos autos blancos.
Pero ella siempre ahí… a mi lado… cebándome unos deliciosos mates con la mejor yerba
Flor celeste…
La yerba que recupera tus energías
(Música)
Fuente: http://www.elargentino.com/nota-164442-Recalculando.html