La Ley Provincial de Teatro Independiente sancionada hace unos años fue el preámbulo de un hecho inédito para la disciplina en el Conurbano bonaerense: atentos a la proliferación de espacios, los teatreros conformaron una red que apunta a visibilizar el trabajo, el arte y el empuje de unas 80 salas distribuidas en once distritos.
Por Natalia Arenas
Fotografía gentileza de Red Teatral Sur
Buenos Aires, octubre 5 (Agencia NAN - 2011).- ¿Qué diría usted si le contaran que en el conurbano bonaerense hay unos 80 espacios artísticos independientes donde se puede estudiar, ver y discutir sobre teatro? ¿Cuál sería su reacción al enterarse de que, a pocas cuadras de su casa, se presentan obras interesantes, con buenos elencos y prolijas direcciones? Seguramente se sorprendería. Porque el imaginario colectivo ubica la oferta cultural en Buenos Aires. Para ver espectáculos de calidad, hay que trasladarse al “centro”, a la “capital”. Error. En materia de diversidad artística, el sur también existe. Y hoy lucha por hacerse visible.
Incluso mucho antes de que la Legislatura bonaerense aprobara la Ley Provincial de Teatro Independiente, los teatreros de varios grupos del Conurbano pensaron en esto de que “la unión hace a la fuerza”. Pero la promulgación de la ley, en octubre de 2009, la posterior conformación del Consejo Provincial de Teatro y la consecuente designación de un fondo anual monetario para los trabajadores independientes de todos los distritos de la provincia fue un fuerte impulso para aunar esfuerzos.
El Consejo resolvió dividir el territorio en 15 regiones. La región sur es la más generosa de todas y, acaso, la más prolífera: contiene a once distritos (Esteban Echeverría, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Lanús, Berazategui, Avellaneda, Ezeiza, Florencio Varela, Presidente Perón, Quilmes y San Vicente), entre los que hay que repartir los casi 186 mil pesos anuales que el gobierno provincial les destina. Exactamente la misma cantidad que percibe una región con, por ejemplo, cinco distritos.
Como una manera de amortizar gastos y considerando que los dividendos no daban buenos resultados a la hora de repartir el dinero entre 80 salas y más de 200 teatreros, la región sur, asamblea de por medio, resolvió resignar proyectos individuales e invertir ese monto en políticas conjuntas. Así, de forma inédita, nació la Red Teatral Sur. Un intento de hacer visible lo que desde hace años se gesta en el sur bonaerense: la oferta cultural y específicamente teatral.
El encuentro con los otros grupos, el intercambio y la puesta en común de las problemáticas que debe afrontar el teatro independiente hizo que los integrantes de esta red comenzaran a sentirse un poco menos solos. “Estas cosas sirven para darte cuenta que no estás solo en el mundo, que el tuyo no es el único teatro al que le cuesta traer gente. Porque, además, el problema no está en el teatro en sí, está en el hábito de la cultura. Y en la falta de descentralización”, opina Mariana Agüero (del Teatro Brancaleone, de Monte Grande, Esteban Echeverría), una de las tantas integrantes de la Red.
Como consecuencia de la urgente necesidad de hacerse conocer surgieron tres proyectos, que fueron aprobados en Asamblea: el de Comunicación, el de Capacitación y el de Formación de espectadores. El primero está casi listo y consiste en el desarrollo de un sitio web (www.redteatralsur.com), que nuclea todo lo que pasa en la escena teatral del sur y permitirá conocer la oferta artística diaria de cada uno de los distritos, con sinopsis y videos de las obras, y la posibilidad de reservar entradas con un sólo click. Igual que para los espectáculos que se ofrecen en “el centro”, sí.
“La idea de la web es comprender que no es necesario ir a Capital para tener una gran oferta cultural. Cuando uno habla del consumo de bienes culturales, piensa en los grandes centros de concentración, y nosotros mismos, hasta que no nos encontramos y nos miramos a la cara, ni siquiera sabíamos la enorme concentración de propuestas artísticas que hay en la zona sur”, destaca Agüero.
El sitio estará online a fines de octubre. Pero para el lanzamiento oficial, la Red piensa tirar las tablas por la ventana: el 5 de noviembre se realizará una “Noche de los Teatros”, en la que todos los espacios teatrales de zona sur van a estar abiertos a la comunidad, con funciones gratuitas.
Mariana Ortíz Losada (del espacio Disparate, de Lanús) es la consejera de la región sur y, por ende, quien representa a los muchachos del conurbano ante el Consejo Provincial y al Consejo ante ellos. Pero, además, ella es una de las responsables del segundo de los proyectos que la Red puso en marcha, el de Capacitación.
“Pusimos el acento en las áreas de Producción y Gestión, porque en el teatro independiente todos tenemos que sí o sí cumplir con el rol de ser gestores de nuestro laburo. Es decir, tenemos que saber venderlo y encontrar los recursos para que pueda funcionar”, explica. Y agrega: “La capacitación surge para que todos podamos democratizar el acceso a esas herramientas que en general son brindadas en cursos súper específicos, en la Capital, y a las que la mayoría de los artistas del conurbano no tenemos acceso”.
Pero, además, los talleres se centraron en oficios que circundan a la labor teatral: el vestuario, la escenografía, la iluminación. No hay que olvidarse que el artista independiente es ése que está en el escenario, pero muchas veces es también quien dirige, enseña, escribe y, por qué no, hace las veces de iluminador, de vestuarista y hasta colabora con la puesta en escena. Lo más interesante, además, es que estos cursos se adecuan a los contextos en los que se trabaja: cómo iluminar con cuatro tachos, cómo producir con escasos recursos…
El tercer proyecto se puso en práctica en abril. Un estudio de campo arrojó datos contundentes: el 92 por ciento de los estudiantes de escuelas secundarias no van al teatro. El programa de Formación de espectadores consiste en la visita de alumnos de escuelas públicas (sobre todo periféricas, pero sin excluir a las céntricas) a teatros de la zona. La idea es que vean dos o tres obras por año, según la posibilidad de los docentes de trasladarlos. Después de cada obra, se arma un debate entre alumnos, docentes y el propio elenco y se le envía un material a los docentes para que trabajen con los chicos en clase. Los resultados fueron más que positivos: todos los que asistieron por primera vez, quisieron volver. En los estudios de campo, los números arrojaron que un 15 por ciento de los jóvenes consideraba que el teatro era propio de una elite cultural y que ellos estaban por fuera de eso. “Había todo un prejuicio, además, de creer que porque estaba cerca, en la zona, no era bueno. El prejuicio de creer que si algo es cercano, no es interesante”, detalla Patricia Devesa, del Centro de Documentación, de Adrogué, Almirante Brown.
Los que saben, los que trabajan y dedican casi la totalidad de su tiempo al teatro independiente, no están tan de acuerdo con este imaginario. “La producción local tiene una identidad desde los textos que se eligen, cómo se montan e interpretan. Hay obras que no son de otros, sino que son hechas por los propios grupos… y eso habla de nosotros: eso es nuestra identidad”, expresa Agüero.
Y el enlazarse, integrarse y formar parte de una misma red hace de este momento histórico, un momento “auspicioso”, en palabras de Ortíz Losada. “Que todos estemos trabajando en distintas cosas en común y que se forme una red en la que todos podamos dar visibilidad en conjunto a todo lo que está sucediendo en la zona me parece extraordinario. Y la cultura no tiene competencia, no por ver una obra en Lomas, vas a dejar de ir a Monte Grande o a Lanús. Eso fomenta aun más el acercamiento”, señala.
Sitio (próximamente): www.redteatralsur.
Fuente: http://agencianan.blogspot.com/2011/10/el-sur-tambien-existe.html
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