martes, 14 de junio de 2011

Noche mágica en el Coliseo

TEATRO - CRITICA

Por IRENE BIANCHI

El popular actor español José Sacristán, que se encuentra de gira por el país, presentó el pasado domingo en el Coliseo Podestá su "Caminando con Antonio Machado".

Espectáculo austero, minimalista, despojado, quintaesencial. El actor y un pianista. Una silla, un atril, un escenario casi vacío. Todo deliberadamente puesto al servicio de las palabras y la música. Las palabras del poeta en boca del actor quien, por arte de magia, se transmuta en Machado, calzándose su abrigo, su sombrero, valija y bastón en mano. Ninguna concesión que distraiga o perturbe el clima intimista del encuentro. 

La sutil y precisa puesta de luces acompaña y dibuja paisajes, previamente esbozados por la voz del poeta, a través de su magnífico intérprete. Una fiesta para el alma este homenaje a Antonio Machado (1875- 1939), poeta que muere en Collioure, al sur de Francia. Su hermano José encuentra un papelito en el bolsillo de su gabán, con sus últimos versos: “Estos días azules/ y este sol de la infancia”. “Me he tomado la libertad de interpretar el último poema de Don Antonio como su deseo de volver a Sevilla”, confiesa Sacristán. De hecho, el subtítulo reza: “De la muerte en el exilio al huerto claro de la infancia, donde madura el limonero”.

En cuanto a la elección de poemas, el actor de películas tan memorables como: “La colmena”, “Solos en la madrugada” y “Asignatura pendiente”, explica: “La selección ha buscado hablar de la vida de Don Antonio sin enfatizar un determinado aspecto. Aparece lo privado, lo político, lo social, la crónica del paisaje.”

Y el resultado conmueve. El pianista, Facundo Ramírez, le propone un viaje al cansado y triste poeta. Dialogan, conversan como dos buenos amigos, se acompañan, transitan senderos en el espacio y en el tiempo, se detienen a admirar algún paisaje, a observar un olmo seco, a reprocharle al Señor el haberle arrancado lo que más quería, a recrear con dolor el asesinato de García Lorca, a soñar que sueñan, a imaginar una España joven, a cabalgar coloridos pegasos de madera, y a recordar que, en definitiva, todo pasa y todo queda.

En el piano: Albeniz, Chopin, Brahms, Mozart, Liszt, Saucan, María Elena Walsh, Facundo Ramírez, hermosas piezas para tan bellas palabras. En tiempos como éstos, de palabras devaluadas, lenguaje bastardeado y música estridente, la cita del domingo en el Coliseo

Podestá fue un verdadero bálsamo para el espíritu.

Fuente: http://www.eldia.com.ar/edis/20110614/noche-magica-coliseo-espectaculos21.htm

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Audición para refuerzos del Ballet Estable del Teatro Argentino

TEATRO ARGENTINO La convocatoria está destinada a bailarinas y bailarines de entre 18 y 34 años. La inscripción se abre el martes 11 de febr...