“A veces la gente está para más voltaje y otras para sutilezas”

Alacrán

27-11-2010 / Hoy, el humorista trae su Iupi iupi tour hasta el Teatro La Nonna

Rodolfo Samsó es un humorista de larga trayectoria en los teatros y en la televisión vernácula, con comienzos palpables en el off porteño y en programas como De la Cabeza y Cha Cha Cha en los albores de los '90. Pero su nombre a la inmensa mayoría le resulta indiferente y eso es mérito de él, por haber construido un personaje de esos que se instalan en el inconsciente colectivo y se perpetúan como íconos más allá de tener pantalla o no. Quizás si se menciona el espectáculo que lo trae esta noche, a las 21, al Teatro La Nonna (3 y 47) de la ciudad de La Plata, a pocos le queden dudas de quién se trata: Iupi Iupi Tour. Sí, es Alacrán ese tímido cuentachistes que arrojaba papel picado para ocultar la indiferencia de los espectadores.

“Siempre trato de hacer un espectáculo muy picadito, con mucho ritmo, busco que la gente no se aburra, trato siempre de meter chistes muy cortitos. También intento ver cómo está el público, a veces la gente está para más voltaje, para palabras más guarangas, y otras veces está para más sutilezas y chistes con doble sentido”, señaló a Diagonales Samsó a la hora del señalar cómo toma en cuenta la temperatura ambiente a la hora de desandar su espectáculo, que por su puesto lo tiene a Alacrán, pero no solo a él.

“Después de Alacrán viene un video de Fernandito, el personaje que se tomó ‘una garompa’. Y después entra un payaso que es un personaje nuevo, Amarguito. Él está convencido que el mundo se termina el año que viene y entonces no tiene sentido nada de lo que hacemos, y la depresión la combate entre contar chistes y tomar Rivotril. Amarguito tiene una canción que se llama ‘Todos nos vamos a morir’ y el circo de él se llama La vida es una mierda.

En el escenario, este payaso hace cuentos, como el de Juan El Largo: un leñador al que se le escapa la motosierra y le corta las piernas, entonces se pasa a llamar Juan El Corto. Deprimido va al psiquiatra porque nadie quiere jugar a la pelota con él ni lo invitan a ir a bailar. El psiquiatra le aconseja que busque amigos con su misma condición. Entonces vuelve a su casa, agarra la motosierra y le corta las piernas a los amigos.

También Amarguito cuenta chistes y hace adivinanzas. Pero siempre fluctúa entre el súmmum del estado de ánimo y el bajón, es el único payaso bipolar. Después aparecen videos de otros personajes, algún Chiche Gelblung que hacía con Freddy Villarreal, uno que muestra cómo nació el Wachón, que aparece con el verdadero Gelblung, y algunos recortes de televisión. Y para cerrar el espectáculo aparece el Wachón, que cuenta los chistes más zarpados del show. Y, además, estrena ‘La cumbia del Wachón’, pero como le faltaron los músicos hace subir a cuatro espectadores y a dos señoritas del público para cantar su cumbia”.

El de esta noche en La Nonna puede ser un buen plan para reírse y disfrutar de la vida, aunque el Payaso Amarguito se empeñe en repetirnos que “Todos nos vamos a morir”

Fuente: http://www.elargentino.com/nota-116081-medios-122-A-veces-la-gente-esta-para-mas-voltaje-y-otras-para-sutilezas.html