Al gran Alorsa… ¡salud!

Espectáculos / 18.12.2011 | Sus canciones con tufillo tanguero representan la renovación del género. No hay Tolosa si no hay Alorsa

La última vez que lo vi a Alorsa me dijo: “ya tengo el nuevo disco terminado, hasta Gerli no paramos”. Y se cagó de risa. “No, boludo, enserio… le pusimos muchas pilas. Este año tiene que ser el despegue definitivo de La Guardia”.

Era el invierno de 2009 y andaba con un pulóver negro, de esos de lana gruesa como el que tejen las abuelas, la boina calzada y la alegría típica que tienen los músicos cuando están por parir un nuevo disco.

Había yirado las diagonales desde la mañana temprano en el tacho nuevo del padre. Llevaba el equipo de mate, una toalla, un montón de volantes de La Guardia Hereje, unos dvd’s y el escudo de San Lorenzo para venerar al azulgrana.

Se acercó al diario para dejar una gacetilla, esas que armaba con tanto ingenio y se las mandaba a todos los contactos cada vez tocaba LGH, y de paso tomar unos mates antes de llevar el auto a la casa para que lo montara su hermano.

El tacho, el fútbol, el mate, el tango, los amigos… delicias de la vida cotidiana que Jorge Pandelucos, Alorsa, supo aprovechar como inspiración para su poesía tolosana, una poesía que todavía no hemos llegado a comprender en su totalidad.

Hay que sentarse, leerlo, escucharlo e interpretarlo. Porque parece fácil hablar del barrio, pero una cosa es chamuyar al cohete y otra es ponerle poesía a temas tan triviales como la traición de alguien que dice ser tu amigo pero se morfó las facturas de cayetano y se hace el otario cuando le preguntás si fue él.

Si estaba atento a esas pequeñas cosas como no iba a estar con el ojo afinado en las grandes, como cuando le sacó la radiografía al Diego escaneándolo como “Gordo cara de galleta caminando medio chueco siempre echado para atrás”, la mejor descripción de Maradona en pocas palabras; en una de las canciones más emotivas que se le hayan dedicado al Diez: "Para verte gambetear".

“En general se cree que a la gente hay que darle siempre lo mismo porque es lo seguro, lo que le va a gustar, y no es cierto. Si vos te preocupás, te esforzás y laburás por hacer una propuesta distinta, la gente responde. Pero bueno, lo importante después es tener los medios que te apoyen y te difundan. Es un tema que es el momento ahora de discutirlo, y tiene que ver con el marco legal y político que le podamos dar con una ley a los medios de difusión. Eso es clave para no seguir remando solos”.

Esto lo decía Alorsa en el 2008, cuando la ley de medios todavía era una ilusión para muchos y casi una utopía pensando que no se podía contra los monstruopolios.

Como músico sabía de la importancia de abrir el abanico, incluso en su rubro, y el mejor ejemplo fue cuando creó El Tango Criollo Club para que toquen grupos y artistas del palo y no tener que pagarle al “avaro bolichero”.

Si hoy se le hace otro homenaje a Alorsa quiere decir que se lo recuerda y se lo valora. Quiere decir que todas esas canciones que escribió no cayeron en oídos sordos y lo que más quiere decir es que no hablamos del tipo en pasado, sino en presente, en la actualidad que tienen sus letras, en la renovación del tango: ese que dejaron oxidar pero que poetas orilleros como él vinieron a sacar lustre.

“Yo siento que nosotros, después de un bache de varias décadas, somos un embrión, como que estamos empezando de nuevo. Nos tocó esta época donde se trata de devolverle el género a la gente; esperemos que en las próximas décadas alguien nos recuerde como un enlace con lo que vendrá”.

Leelo e interpretalo. Jorge Marcelo Pandelucos, Alorsa, de la república separatista de Tolosa, el de La Guardia Hereje.

Ulises Rodríguez

Este domingo, Alorsa con todos

Jorge “Alorsa” Pandelucos, ese querido poeta popular -tolosano hasta las manos- que supo anunciar “señores: vuelve el tango, muzzarella y sin barullo, a reclamar de nuevo lo que es suyo”, será homenajeado una vez más. La cita es hoy, a partir de las 15,en la plaza Bocha Esperanza (6 y 526).

“Un domingo con Alorsa” es el nombre elegido para el encuentro. Se trata del segundo que se realiza tras la muerte del hombre que lideró La Guardia Hereje, esa banda de tango criollo que renovó la prosa milonguera.

“La idea surgió el año pasado, al cumplirse un año de la muerte de Jorge. Queríamos hacer algo para que no se olvide la obra que dejó”, resumió Martín Luna, uno de los organizadores del encuentro, además de vecino, ex alumno y amigo del cantor.

Alorsa, que supo cantarle al barrio, a las picardías de potrero, al amor de la esquina, será homenajeado en la calle, rodeado de vecinos, de gente del “rioba”, de amigos inquebrantables. Todos ellos piensan en la trascendencia que llevan los versos que supo escribir ese artista de la “lleca”. Un tipo simple, alegre y comprometido.

“El temor es que toda su producción caiga en el olvido. Todavía no podemos tener dimensión del valor de la poesía de Jorge, del compromiso de su prosa. Eso lleva tiempo, y en ese tiempo nosotros como amigos, como gente que ha admirado tanto la música y la poesía de La Guardia tenemos casi la obligación de que no caiga en el olvido”.

Será por eso que una de las actividades previstas para este domingo es la ampliación del mural que fue pintado el 5 de septiembre del año pasado en la esquina de 6 y 528, al cumplirse el primer aniversario de su fallecimiento. Esa misma esquina podría llamarse Jorge Alorsa, pues a eso apunta la campaña que comenzará también este domingo en la que se recolectarán firmas de vecinos para que la moción sea un hecho.

“Hasta marzo o abril vamos a continuar recolectando firmas. Después presentaremos el proyecto en el Consejo Deliberante. Tantas calles llevan el nombre de milicos; que una de ellas tenga el nombre de un poeta popular, no creo que genere problema”, relató Martín Luna.

Pero no sólo se trata de dejar rastros en las paredes del barrio, porque además se convocó a quienes se sumen a este homenaje a traer un par de zapatillas –en buenas condiciones, claro- que serán donadas a la Casa Joven del Hogar del Padre Cajade. Inclusive serán jóvenes de la Panadería El Viejo Pepe –el brazo productivo de la obra- los que ofrezcan pan dulce y facturas.

Todos los que se acerquen a recordar a quien supo ser un cultor de lo popular, podrán también participar de un torneo de metegol que tendrá lugar sobre la plaza. Sebastián Marín, Fernando Tato, Los Faroles y la comparsa de candombe Kilombo 14 dirán presente en una jornada en la que se rendirá homenaje a un gran compañero. Además se montará una radio abierta y habrá serigrafía.

Arrabalero. Quienes organizan la movida de este domingo recuerdan a Alorsa como “un tipo capaz de crear mil universos a través de su poesía. Un tipo que miró los rincones olvidados y todo ese arrabal del mundo que está en la esquina de cada barrio”. Y en tiempos donde el nivel de inteligencia de una persona pareciera ser proporcional a la dificultad del vocabulario que utiliza, la simpleza de las letras de La Guardia son un hallazgo.

El propio Carlos Jara lo definió como “el poeta que el tango estaba esperando”. Y algo de eso debe haber ocurrido: el dos por cuatro suele asociarse a generaciones anteriores, pero al parecer, Alorsa, vino a desempolvar la milonga. Y en el camino dejó una barra de amigos, que son los que organizan la movida de este domingo. Que son todos y no son ninguno. “En realidad esto esta organizado por todos, se arma entre todos. Cantores, músicos, amigos, familiares”. También se suma mucha gente de Capital Federal que ayudó al cantor a darle impulso y difusión a su proyecto.

“Jorge nos vuelve a juntar este domingo para escuchar sus canciones, sus poesías”, comentó Martín. Y todos los que admiran a ese muchacho de barrio y a su obra, se congregarán en esa plaza pequeña, en cuya esquina puede verse un mural con el símbolo de la Guardia y una leyenda que reza: “Y salú la barra, dale que va”.

Cecilia Toledo