Miercoles 6 de Julio de 2011
Arte y ciencia, de la mano
Transmiten alegría a travès de la ternura y la risa.
Cuando de padecimientos se trata, siempre hay diversas alternativas en métodos y tratamientos. Sin embargo, esta es una propuesta que innova y sorprende: la risa y el entretenimiento acompañando la medicina, una metodología distinta, de la mano de una Asociación Civil que viene pisando fuerte.
Texto y entrevistas: Josefina Marcuzzi
Fotos: Yolanda Veloso
¿Payasos en los hospitales? ¿Personas disfrazadas entreteniendo a los pacientes? Este es el panorama que uno se encuentra cuando ve a los Payamédicos en acción: una Asociación Civil que nació en la Capital Federal, y se dedica a hacer la rutina de los pacientes más llevadera y descontracturada.
La terapia de la risa es una metodología que consiste en acompañar a aquellas personas que sufren determinadas dolencias, mediante la risa, el entretenimiento y la diversión. Con técnicas especializadas, el fin primero es lograr desdramatizar la condición e inyectar salud, en lugar de curar la enfermedad.
Su objetivo es contribuir a la salud emocional del paciente hospitalizado. Para tal, utilizan recursos psicológicos y artísticos relacionados con juegos, música, teatro, magia y humor.
Al respecto, María Blatz, una de las docentes de los cursos y miembro de Payamédicos La Plata, contó a LA DATA que “los Clowns tenemos un nombre que sirve para desdramatizar el ambiente hospitalario, que es un nombre común junto con uno relacionado a la medicina. Por ejemplo Fresia Analgesia o Panoma Ribosoma. Así se entra a ese otro mundo… del mismo modo, usamos un Estetosflorio en lugar de un estetoscopio, que es una flor para escuchar el corazón…o andamos con una Jeringaraca, en donde la jeringa en lugar de pinchar, hace ruido…irrumpimos en un mundo de colores, desdramatizamos el dolor y brindamos alegría”, explicó.
Roger Horna Miraya es estudiante de medicina de la UNLP y asiste a los cursos formadores de clowns. En diálogo exclusivo con LA DATA, contó que “Payamédicos es una Asociación Civil formada en Capital Federal, que ahora tiene sedes en Santa Fe, Neuquén, Río Negro y Córdoba. Se trabaja como clown o payaso hospitalario, es una técnica que acompaña a los pacientes, que se inició con niños y después se amplió a adultos”.
Metodología y objetivos
Comenzando por la metodología, Payamédicos entiende la salud como un proceso que involucra diversos factores, entre los cuales está presente la enfermedad. Por ello, su objetivo es no solamente curar, sino sobre todo, generar salud.
Los Payamédicos trabajan al lado del paciente, pero siempre se le pide su consentimiento para la intervención. Además, están preparados para garantizar el respeto y la confidencialidad que requiere el medio sanitario y el hospitalario en particular. Para tal fin se han formado en el dominio de tres áreas estrechamente relacionadas: artística, psicológica y su adaptación al medio hospitalario.
“Hay un mecanismo fisiológico que, mediante la risa, se produce la liberación de endorfinas”, explica Horna. “Generalmente, el desarrollo de la enfermedad no tiene que ver sólo con cuestiones orgánicas, sino también emocionales y psicológicas, por eso se intenta desdramatizar el padecimiento”.
Se busca mostrarle al paciente el lado bueno de las cosas, hacer más llevadero el proceso y acompañar el desarrollo de la enfermedad que, en el mejor de los casos, puede concluir en la superación.
¿Cuándo interviene un clown en la vida de un paciente en el hospital? En ocasiones, los mismos médicos, al no encontrar soluciones orgánicas ni fisiológicas, acuden a Payamédicos en búsqueda de un apoyo psicológico. Otras veces, se eligen de acuerdo a un estudio de caso; también los mismos familiares recurren a ellos, en necesidad de una contención o compañía.
“Las intervenciones no son algo preestablecido, no es una puesta en escena, ni un espectáculo. Es único porque se trabaja con lo que el otro quiere trabajar, y la intervención apunta al imaginario…”, explicó Blatz a LA DATA.
En pacientes con internaciones prolongadas, además, se realiza un seguimiento teniendo en cuenta sus necesidades, las de su familia y del equipo médico asistencial.
El tratamiento difiere si se trata de niños o de adultos. En el primer caso, Payamédicos destaca la necesidad de permitirle al niño enfermo mantener sus características de niño, a pesar del padecimiento: divertirse, jugar y conservar sus ilusiones.
“Las experiencias son distintas entre niños y adultos, pero en ambos ámbitos se puede trabajar… hay payasos que se sienten más cómodos con unos u otros, y ahí radica el éxito de las intervenciones. En adultos hay otro tipo de enganches, intereses o temas en común. En niños se juega más con la resistencia, con la música y el juego”, sintetizó Guillermina Raffo, payamédica y supervisora del grupo.
¿Quiénes son? ¿Dónde trabajan?
Payamédicos es una Asociación Civil, como adelantamos, constituida en Capital Federal en el año 2003. Sus fundadores son el Dr. José Pellucchi y la Lic. Andrea Romero.
Surgió mediante el trabajo de estos referentes con profesionales de la salud que querían manejar los tratamientos e intervenciones de otro modo, pensando en algo diferente.
“Comenzaron a pensar en un grupo, en payasos de hospital, que tuvieran su organización y cuyo objetivo fuera trabajar en la salud emocional del paciente hospitalizado. Entonces diagramaron una formación, que tiene que ver con tomar aspectos del clown (micropolítica de la ternura), trabajar con los aspectos tiernos y humanos, y no los aspectos de diversión o pantomimas de los payasos”, explicó Raffo.
Payamédicos no cuenta con recursos del Estado ni ningún tipo de financiamiento político, es un trabajo voluntario y ad honorem. Los fondos con que realizan sus actividades se recaudan a través de los cursos formadores de clowns, que se llevan adelante en distintos puntos del país.
El grupo está coordinado y supervisado por médicos y psicólogos con amplia experiencia en niños y adultos internados por diversas patologías orgánicas.
Cursos formadores de Payamédicos
Los Payamédicos realizan una continua formación interna, que consta en un curso de tres meses de duración. En él se abarca tanto aspectos de la técnica de clown así como temas de medicina y la ética en el hospital.
Los payasos hospitalarios conforman diferentes grupos de estudio, a través de los cuales se realizan revisaciones bibliográficas, trabajos de investigaciones y se generan diversos proyectos.
“En general en Payamédicos se forman estudiantes de medicina, o de psicología, o trabajan en un ámbito de salud. Pero también está viniendo gente de teatro, de arte… Hay una formación previa, más la del curso, que dura 3 meses, y luego 3 meses más de pasantía. Esta consta de la intervención en algún hospital en compañía de Payamédicos ya formados”, explicó Raffo a LA DATA.
Los cursos están dictados por payamédicos fundadores, médicos, psicólogos; es gente que no solamente está capacitada para desarrollar la técnica, sino también para formar y capacitar a otros payamédicos.
“En los cursos se aprende una parte teórica y una parte práctica. En la práctica se trabaja técnica de clown y expresión corporal; y en la teórica aspectos como el psicoanálisis, para ver cómo uno se puede conectar con el niño, de acuerdo a la maduración del mismo”, profundizó Horna.
“La formación tiene que ver además con los aspectos estéticos: el clown siempre tiene mucho color, no se maquilla, se utilizan colores alegres. El blanco se asocia al médico, el negro al duelo… A través de lo estético, se intenta quitar lo siniestro que está en el imaginario en relación a una jeringa, a una intervención…. Se juega con estas cuestiones que producen dolor, que generan una ruptura en la vida cotidiana del paciente”, afirmaron tanto Blatz como Raffo.
Payasos hospitalarios, una forma de ser
La técnica de payasos hospitalarios no tiene un objetivo en particular. El resultado de la terapia está directamente relacionado con cada paciente, y por eso es único e irrepetible.
“Los resultados varían en cada paciente porque depende de cada persona, no hay una receta… pero desde la propia metodología de Payamédicos, se provoca un efecto de salud… no buscamos la risa, eso es un efecto, buscamos un proceso en la singularidad de cada paciente”, explicó la supervisora Raffo.
Sencillamente, acompañan un proceso de dolor, aliviando el miedo y produciendo alegría a través de la ternura y la risa, para naturalizar esa ruptura y conectar al paciente con su vida cotidiana.
Esa es, sencillamente, la filosofía de vida y de trabajo de Payamédicos.
Fuente: http://www.ladatainfo.com/nota.asp?n=&id=62&id_tiponota=5
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