Ópera
Una interpretación magistral de una obra sabiamente compuesta por Osvaldo Golijov y mejor realizada
Por Pablo Kohan | Para LA NACION
La Pasión según San Marcos : de Osvaldo Golijov / Elenco: Biella Da Costa, vocalista de jazz; María Hinojosa Montenegro, soprano; Reynaldo González Fernández, cantante y bailarín afrocubano; Deraldo Ferreira, capoerista y berimbau; orquesta La Pasión; Schola Cantorum, de Venezuela; cuerdas de la Orquesta Estable del Teatro Colón / Dirección: María Guinand / Función: Gran Abono. Teatro Colón / Próximas funciones: hoy y mañana.
Nuestra opinión: excelente
Aunque el contexto no fue el mejor, lo que sucedió en el Colón, por su significación y por el estupendo nivel de realización, fue histórico. Podrían enumerarse algunas posibles razones para explicar la situación pero todas serían hipotéticas, no demostrables. La cuestión es que para el estreno argentino de La pasión según San Marcos, el teatro lució llamativamente despoblado. Una picardía porque lo que aconteció en el escenario fue memorable.
Los registros discográficos y la estupenda versión existente en DVD de esta obra, tomada en Amsterdam, en 2008, en la que participan casi todos los artistas ahora presentes en Buenos Aires, podían hacer suponer que habría poco lugar para las sorpresas. Sin embargo, jamás una grabación o una filmación musical podrán reemplazar a la experiencia en vivo. Más allá de los imponderables y de la impronta que la performance implica, hay cuestiones concretas de sonido que son irremplazables y únicas. Sobre todo si los grandes protagonistas son el coro y la percusión, cuyos sonidos son aún inasibles en toda su magnitud, incluso, para las técnicas más avanzadas. Luego de la tenuidad inicial del "Bautismo en la cruz" y la "Danza del pescador pescado", Jesús y Marcos anuncian qué está sucediendo. Esos primeros sucesos están a cargo del coro y de un solista cuyos cantos son acompañados, únicamente, por la percusión. Así, sin anestesia, Golijov, contundente, instala al Evangelio según San Marcos en la realidad sincrética de Cuba, el Caribe y Brasil. El nivel de sutileza de los percusionistas y la precisión, nuevamente, musical y teatral, del coro, mágicamente guiado por María Guinand, abrieron las puertas para una interpretación magistral de una obra sabiamente compuesta y mejor realizada.
Son muchas las causas para la gran recepción que ha tenido La Pasión de Golijov. Con todo, y más allá de la increíble profusión de ideas, de la implementación creativa y original de recursos académicos y populares de la más diversa índole y de la presencia de un conjunto notables de músicos y cantantes, el secreto del gran impacto está en la unidad conceptual que la atraviesa incólume de principio a fin y en la capacidad desplegada por Golijov para poner en acción esos mencionados elementos, por demás variopintos e inusuales, en un devenir musical y dramáticamente atrapante y contundente. El libreto elaborado sobre el más ágil y breve de los Evangelios plantea escenas puntuales musicalizadas de modos absolutamente diferentes. Sólo por nombrar una de ellas, a todas luces injusto y reduccionista, no puede dejar de mencionarse la fortaleza expresiva y la sensación trágica y categórica de la muerte de Jesús, intensa y desagarradora, cuadro que es preparado de modo extraordinario por "La comparsa al Gólgota", "La danza de la sábana púrpura" y "La crucifixión".
En La pasión según San Marcos concurren diferentes solistas. Tal vez, Biella Da Costa, una estupenda vocalista, sea la más destacada por la cantidad de momentos que requieren su presencia y con cuyo canto se extingue la obra. Pero hay que señalar también a María Hinojosa Montenegro, una exquisita soprano lírica, a cinco percusionistas asombrosos, a cada uno de los integrantes del coro que asumen papeles solistas y a las cuerdas de la Estable que se integraron al resto con solvencia y seguridad. Obviamente que a María Guinand le corresponden todos los elogios por una dirección impecable. Pero el final está destinado a la Schola Cantorum, un coro deslumbrante que es la columna vertebral de esta obra y que con cantos, movimientos y distinto tipo de emisiones vocales se revela como indispensable y capital.
Quedan todavía dos funciones más de La pasión según San Marcos. Un Colón abarrotado y multitudinario sería el marco ideal. En todo caso debería quedar en claro que el beneficio sería muto. Porque La pasión según San Marcos de Golijov se lo merece y porque este elenco increíble garantiza la mejor y más emotiva presentación de una obra que es imprescindible y fundamental..
PARA TODOS
La función de mañana, a las 17, podrá ser vista en la página www.teatrocolon.org.ar
Fuente: http://www.lanacion.com.ar/1457203-la-pasion-segun-san-marcos
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