Es en la sala lírica, la más importante del Argentino. Tiene una capacidad para 2.200 personas sentadas. Pero con la decisión de la Dirección podrá albergar sólo a 1.890. Las autoridades del complejo consideraron que “desde esos lugares hay dificultad en la percepción hacia el escenario”
El 30 de octubre pasado, barítonos internacionales le dieron el “toque” final a la inauguración oficial de la sala Alberto Ginastera, en el Teatro Argentino de nuestra ciudad. La sala lírica, constituye el sector más relevante del complejo cultural (ubicado en 51 y 10) y tiene una capacidad para 2.200 personas sentadas. Sus palcos, distribuidos en tres pisos, ofrecen una ubicación inmejorable, incluso, según lo estiman los profesionales, la vista desde esos sitios es superior a la que se puede percibir en el Teatro Colón de Capital Federal (considerado uno de los más importantes del continente).
Sin embargo, cerca del 15 por ciento de la Sala quedará en desuso porque de acuerdo a una serie de quejas que recibió la dirección del complejo “desde algunas butacas y asientos no se puede ver bien”. Por ello, Pedro Pablo García Caffi, titular del Teatro, decidió retirar de la venta 310 ubicaciones que de acá en adelante no estarán contempladas dentro de la gama de oferta de la sala. Con esto, la recaudación del complejo se verá sensiblemente disminuida, aunque la intención de la Dirección es que de este modo se pueda jerarquizar la Sala, para que todos los espectadores que abonen su entrada disfruten del mejor modo del espectáculo.
La obra de reconstrucción del Teatro Argentino (que se incendió en la década del ‘70 y se empezó a levantar otra vez en el ‘80) demandó una inversión superior a los 100 millones de dólares y tuvo varios altibajos: estuvo parada durante años y se retomó en 1992. En la actualidad restan algunos trabajos por hacer dentro del complejo, aunque las principales instalaciones funcionan a pleno.
Tomás Oscar García fue uno de los proyectistas del emprendimiento y oportunamente se refirió a los problemas de visión que se podrían percibir desde las butacas. Hace más de un año el arquitecto señaló que “las especulaciones acerca de los problemas visuales son apresuradas”.
Las críticas en un principio apuntaban a que la distancia entre los asientos era escasa. Sin embargo, el profesional -artífice de una de las obras más importantes de Sudamérica- indicó que las reglas internacionales establecen que en cada sala lírica las butacas deben estar separadas por una distancia de entre 85 y 90 centímetros.
En los palcos y plateas superiores la distancia llega a los 90 centímetros, mientras que en las plateas comunes la separación es de 95 y en las primeras filas de plateas superiores es de 1,10.
El martes se presentaron en este complejo la ópera clásica Edipo Rey (Igor Stravinsky) y el ballet dramático El Mandarín Maravilloso (Bela Bartok); con una excelente producción en lo que a indumentaria respecta y con la puesta en escena de tenores y barítonos alemanes. Y se pudo advertir la realización de un espectáculo imponente en la sala lírica, aunque esta vez no se vendieron 310 entradas. Y es que, según las mismas autoridades del complejo, “muchas personas se comunicaron al Teatro quejándose porque desde algunos sitios no se podía visualizar correctamente el escenario. Fue entonces cuando el director ordenó la realización de un relevamiento y consideró que 310 butacas (ubicadas en distintos sectores de la Ginastera) debían sacarse de la venta”, explicaron.
En lo sucesivo, una Sala que había sido planificada para albergar a 2.200 personas tendrá capacidad para 1.890, porque según la Dirección -y tras la ejecución de un estudio- se pudo detectar que por su emplazamiento esas ubicaciones retiradas “pueden ocasionar a sus ocupantes cualquier tipo de dificultad en la percepción de lo que ocurre en el escenario”.
En el complejo explicaron que “los lugares que se sacaron de la venta son variados. Hay butacas, filas, plateas y palcos”. En cuanto a su construcción, García manifestó además que “hemos sostenido la tradición barroca de los palcos laterales, por mantener el gesto de que el público abrace la escena, sabiendo inclusive que siempre al perder la frontalidad al escenario hay un perjuicio visual”.
Las comodidades de la sala lírica dieron la posibilidad a los platenses de disfrutar de espectáculos prestigiosos como la presentación del catalán Joan Manuel Serrat y en el futuro, de Alejandro Dolina, con su opereta Lo que me costó el amor de Laura.
A principios de año se inauguró oficialmente la Sala Astor Piazzolla, uno de los espacios más reducidos del complejo, aunque con una acústica y una arquitectura “envidiable”, según lo destacan profesionales del sector.
Junto a la lírica conforman un abanico de ofertas culturales importantes. En el Teatro consideran que al ser éste un sitio prestigioso “ante las quejas de los vecinos deben retirarse las butacas”. Pero previo a ello hicieron un detallado relevamiento en el que aparentemente confirmarían las versiones del público disconforme.
Por lo pronto, el Teatro Argentino aparece en La Plata como una opción excelente en lo que a actividades culturales se refiere e incluso permite que shows de “categoría” (que durante años fueron exclusivos del Colón) puedan ser presenciados en nuestra ciudad.
Se realiza una exposición del Archivo Histórico provincial
Con la presencia del gobernador bonaerense Carlos Ruckauf se realizará hoy en el Teatro Argentino platense una exposición del Archivo Histórico provincial, en conmemoración de los 75 años de esa entidad oficial.
En la muestra se darán a conocer documentos nunca antes revelados a la opinión pública como el expediente judicial original del gaucho Juan Moreira y una carta del cura de la San Ponciano de 1888.
Además, se podrán ver las leyes de Indias y libros que datan del año 1516, donde se recopilan las sentencias criminales de la época de Felipe II en España. Dichos libros fueron escritos por los europeos y llegaron a manos de las autoridades del archivo hace más de medio siglo. Otros documentos a los que tendrán acceso los platenses se vinculan a la fundación de la ciudad de las diagonales, como por ejemplo la ley de radicación de la “nueva capital de la provincia”.
Fuente: http://pdf.diariohoy.net/2000/11/30/pdf/15.pdf