Marcelo Arena

Su fallecimiento

Con el fallecimiento de Marcelo Arena, a los 40 años, la Región despide a un docente y actor que supo cimentar desde la pasión, el compromiso y la solidaridad una destacada trayectoria en múltiples ámbitos culturales, sumando a los méritos académicos una ampliamente reconocida calidad humana.

Hijo de Blanca Delia Alemán y Antonio Arena -futbolista que integró el histórico plantel del Lobo del '62 con jugadores emblemáticos como Minoián, Davoine, los Bayo, Ciaccia y el "Tanque" Rojas-, hermano de Alejandro, Marcelo Aníbal nació en Ensenada el 12 de diciembre de 1970.

Tras completar los estudios primarios en la Escuela Nº4 de la ciudad ribereña, cursó el bachillerato en el Colegio Nacional "Rafael Hernández" e inició -ya radicado en La Plata- la carrera de Letras en la Universidad Nacional. Graduado como profesor, encaró una intensa actividad docente que lo puso al frente de cursos de Lengua y Literatura en el Nacional, el Liceo "Víctor Mercante", la EPB Nº19 y las escuelas de Enseñanza Media Nº14 y Nº2 de Berisso. Además, dictó Semiótica Teatral en el Bachillerato de Bellas Artes.

Estrecho colaborador de la cátedra de Literatura Española II de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, se hallaba preparando su tesis doctoral. Analista de textos agudo y riguroso, participó en numerosos congresos, jornadas, talleres y conferencias nacionales e internacionales desplegando sus vastos conocimientos de literatura española contemporánea.

Actor recibido en la Escuela de Teatro local, vinculado profesional y afectivamente con el Centro Cultural "Viejo Almacén El Obrero", fue dirigido por Diego de Miguel, Adriana Sosa, Miguel Dalmaroni, Gastón Marioni, Cynthia Pierce y Fabián "Vasco" Andicoechea, y jugó papeles en obras como "Donde los trenes se desbocan", "Sangre en la tierra de Navarro", "New York", "La muy excelente y lamentable tragedia de Romeo y Julieta", "Tres, tres, tres" y "El culebrón", compartiendo elenco con Juan Pablo Pereira, Diego Cremonesi, Anahí Carnevale, Víctor Fernández, Silvia Ferrer, Juan Felipe Hernandorena, Virginia Naón y Sergio Peretti, entre otros. Su militancia gremial en la Asociación Argentina de Actores fue particularmente apreciada por sus colegas.

Arena, quien se topó con la muerte en la ruta 74, cuando conducía su automóvil rumbo a Monte Hermoso, vivía en 40 y 118 con su hermano Alejandro, a cuya recuperación de un serio accidente se dedicó con infinito afecto y responsabilidad después del fallecimiento de sus padres. Avido lector, incondicional del Quijote, podía seguir varias novelas a la vez; la música clásica y el inagotable repertorio de Serrat solían ambientar sus horas domésticas.

Hincha "tripero" de ley, solía engancharse con transmisiones televisivas de partidos locales e internacionales, y "se olvidaba del mundo" cuando preparaba suculentas carnes al horno o encendía la parrilla para entregarse al ritual del asado criollo. "Era paciente y tolerante con todo el mundo, quizás demasiado; tenía un corazón gigante" lo recordaron los suyos: "brillante como profesor y querido por sus estudiantes, lo más importante es que fue fiel a sus convicciones y una persona de bien".

Fuente: http://www.eldia.com.ar/edis/20110118/laciudad1.htm