Un viejo despertador de campanillas suena por primera vez y, de inmediato, un grupo de abuelos sale de sus habitaciones y se dirige hasta el comedor.
Todos saben que ésa es la señal que da la asistente social para convocarlos a una nueva emisión del programa radial que, desde hace varios meses, modificó el ritmo habitual de sus vidas.
Como todos los martes, diez abuelos de los treinta que hay en el Hogar de Ancianos “Dardo Rocha”, del Centro de Salud Nº 39 de Villa Elisa, ponen voz y cuerpo al “El conventillo del 39”. Se trata de un radioteatro, creado por ellos mismos y por las autoridades del geriátrico, que el próximo 4 de diciembre será presentado a la comunidad cuando se cumpla el 27º aniversario de la institución.
En la obra, todos representan un papel. Está Giussepe, que es el encargado del conventillo y los inquilinos como el guapo, la italiana, el turco Alí y la gallega, entre otros. Cada uno de estos personajes fue compuesto por los mismos abuelos, que se encargaron de armar los diálogos y brindar su propia esencia a los protagonistas. “El radioteatro estámuy bien logrado porque nosotros conocimos los conventillos y sabemos qué psique tienen sus personajes. Es una obra de mucha calidad”, señaló Dalmiro, uno de los residentes del hogar que escribió el guion.
Según indicó a Hoy la directora del Centro, Mirta Martínez, el radioteatro “nació como una forma de terapia”. A través de éste, lo que se busca no es ocuparse únicamente de la salud física de los residentes, sino ir mucho más allá y trabajar en nuevos espacios de cura y de sanación.
Primero nació “El despertador”, que es la radio interna del hogar. En ella, los abuelos ponen en juego toda su creatividad y experiencia vivida. “Con el nombre de la emisión representamos el desafío de despertar día a día de nuestras limitaciones, de las presiones y las prisiones de nuestro corazón y nuestra cabeza. A veces transcurrimos la vida como dormidos.
Y aun en los momentos finales de la vida, siempre hay un tiempo para despertar a otras realidades”, expresó la directora del geriátrico. Para la presentación en público, que se realizará el día del aniversario, ya está trabajando todo el hogar. Incluso las autoridades y el personal que interpretan a algunos personajes.
“Ya pudimos armar un vestuario y conseguir elementos típicos de la época, como una lámpara a queroseno y una máquina de fotos antigua”, comentó Silvia Fuentes, asistente social del centro. “Varios voluntarios se ofrecieron para armar la escenografía y una persona va a cantar y tocar el piano. También va a colaborar un actor que se va a ocupar de aceitar algunos aspectos de la obra”.
La asistente destacó varios logros del radioteatro. “Trabajamos áreas como la memoria, la comunicación, la tensión y los miedos”, finalizó.
Un acercamiento entre las generaciones
El próximo 4 de diciembre, los abuelos del Hogar de Ancianos “Dardo Rocha” de Villa Elisa estarán de fiesta. Celebrarán el 27º aniversario de la institución representando para la comunidad el radioteatro “El conventillo del 39”. En esa ocasión, tendrán la oportunidad de sentirse reconocidos y valorados por el trabajo que vienen preparando desde hace varios meses.
No será la primera vez que los abuelos vayan a actuar en público. Fueron visitados por jardines de infantes, con los que interactuaron en escena y compartieron gratos momentos. “La experiencia radial de los abuelos, además de ser útil para ejercitar la memoria y como pasatiempo, es fundamental para rescatar la historia viva de nuestro país a través de la palabra de sus protagonistas”, destacó el psicólogo Alfredo Olivera, fundador de la radio La Colifata de los internos del Hospital Borda, en diálogo con Hoy. Para el especialista, el radioteatro sirve para acercar a las distintas generaciones.
“Buscamos sanar emociones”
En el Hogar de Ancianos Dardo Rocha, de Villa Elisa, las autoridades hacía tiempo que buscaban la manera de trabajar en el bienestar físico y espiritual de los abuelos. “Nos propusimos sanar emociones y vencer limitaciones. Por eso empezamos con las canciones, reflexionando sus letras y cantándolas. Luego seguimos con el juego. Trabajamos con cuentos, improvisaciones, teatro espontáneo y dramatizaciones”, expresó la directora, Mirta Martínez.
Agregó: “Nos dimos cuenta que, a través del juego, es más fácil para los abuelos enfrentar la realidad. Están más distendidos y el clima es de mayor alegría y menos tensión. Así surgió la idea de abrir la radio como un espacio de cura y terapia”.
Los resultados de la experiencia, que comenzó hace seis meses, ya están a la vista. “Cuando ensayamos el radioteatro, es una hora de distracción para mí. Además, me recuerda la época cuando era guapo”, expresó Dalmiro, uno de los abuelos. Algo similar opinó Luisa. “Es lindo. Aparte de eso, pasamos el rato. Acá se hacen largos los días”, señaló está mujer que lleva
contados los días que ingresó al hogar. “Estoy hace un año, un mes y quince días”, apuntó.
La iniciativa de crear un radioteatro no fue casual para las autoridades del hogar. Tuvieron en cuenta que se trató del único medio de comunicación que existía en las primeras décadas del siglo XX.
“La radio aglutinaba a la familia. Había pocos equipos y la gente presenciaba en vivo los programas”, explicó Silvia Fuentes, asistente social del centro de salud. La participación de los abuelos en el radioteatro fue central, sobre todo el aporte de Dalmiro, que fue quien escribió la trama. “Dalmiro personifica a un guapo avanzado en sus años que está deseando que la muerte le llegue a través de la batida en duelo con otro guapo. Pero, en realidad, se trata de la muerte de las limitaciones y las creencias obsoletas, y el renacer a nuevas oportunidades”, destacó Martínez.
Fuente:http://pdf.diariohoy.net/2005/11/27/pdf/15-c.pdf
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