El teatro comercial "culto" y sus reiteraciones

Sábado 01 de septiembre de 2012 | Publicado en edición impresa

La semana al día / Opinión

Por Alejandro Cruz | LA NACION

Cierta franja del teatro comercial porteño viene apostando fuerte a un tipo de propuestas de ingredientes muy marcados. Por un lado, se montan obras anglosajonas contemporáneas en las que, matizadas con diálogos y situaciones de una fuerte carga irónica, confrontan situaciones de la más amplia gama bajo el paraguas del pensamiento de lo políticamente correcto. Claro que, en general, el paraguas viene con algunos agujeros (caso más actual: Cock , un esquemático y cuestionable texto del inglés Mike Bartlett).

Estas obras llegan a la avenida Corrientes y sus alrededores bajo la dirección de creadores que fueron fundamentales en la renovación de la escena alternativa (caso Javier Daulte, caso Daniel Veronese o Claudio Tolcachir). A ellos, y algún otro director que se cuele entre este trío, les toca trabajar junto a actores de mayor o menor convocatoria, pero de indiscutible nivel (de hecho, varias veces estos intérpretes se convierten en piezas vitales de este entramado).

El paquete se completa con un despliegue escenotécnico que, en general (todo este comentario está regido por las imprecisas generalizaciones), pone en juego una variedad de efectos escenográficos que parecen responder al imaginario de ver una gran producción teatral (en verdad, desde esa perspectiva son todas grandes producciones).

Así parece cerrarse un círculo perfecto. En verdad, casi perfecto. Es que de tanto repetir los mismos recursos, la sorpresa comienza a brillar por su ausencia y termina ganando terreno lo previsible..

Fuente: http://www.lanacion.com.ar/1504278-el-teatro-comercial-culto-y-sus-reiteraciones