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miércoles, 2 de junio de 2010

En nuestra ciudad existe una sala de títeres que se llama El Teatrino

Las verdaderas manos a la obra

En nuestra ciudad funciona una sala de teatro exclusiva para espectáculos de títeres, un arte antiquísimo que se renueva todo el tiempo, y del que existen múltiples propuestas, tanto para chicos como para grandes. Allí también funciona una escuela de titiriteros.

Casi inconscientemente, pensar en títeres remite a un espectáculo infantil. Sin embargo, esta disciplina artística tan popular y conocida como curiosa y peculiar tiene muchísima historia -tanta, que resulta imposible llegar hasta sus orígenes más remotos-, e interesantes costados que a veces sólo conocen quienes integran este verdadero mundo de fantasía.

Y, aunque el público de este tipo de espectáculos no sea masivo en cantidad, también es cierto que casi todas las personas comparten una misma anécdota infantil, que puede señalarse como el primer antecedente de los títeres: haber hecho hablar a un muñeco en algún momento de su vida. Claro que, como espectáculo artístico, está compuesto de muchos elementos más.

En nuestra ciudad existe una sala de títeres que se llama El Teatrino, y está ubicada en calle 11 entre 61 y 62. El grupo que le dio vida es El Sombrero, y consiste en un elenco de Teatro de Títeres que nació en 1990, y que fundó la sala en julio de 2001. Actualmente, El Sombrero sigue funcionando y está integrado por Cecilia Incurato, Leandro Melluso y Daniel Melluso. Este último es el director de El Teatrino.

Apenas abrió sus puertas, hace casi nueve años, este espacio de títeres fue declarado de Interés Cultural por la Municipalidad de La Plata y de Interés Provincial Permanente por la Legislatura de la Provincia.

En diálogo con Hoy, Daniel Melluso explicó que el teatro de títeres, cuando apunta a los adultos, se distingue principalmente del de chicos por las temáticas que trata. En ese sentido, recordó que este tipo de espectáculo comenzó siendo, en realidad, un género para adultos, y que luego, “por distintas circunstancias, comenzó a escolarizarse y a orientar sus propuestas hacia los niños”.
Tanto en el antiguo Egipto, como en Roma, Grecia, y tantas otras de las primeras civilizaciones, se han hallado registros de la existencia de títeres, como parte de funciones de entretenimiento, de rituales religiosos, de mitología, etc.

Para el director de El Teatrino, la gran ventaja de este arte es que “prácticamente no tiene limitaciones” a la hora de contar una historia, al tiempo que lo definió como “la metáfora absoluta”.

Consultado acerca del lugar que ocupan los títeres en nuestra ciudad, Daniel manifestó que es de mucho desarrollo y, sobre todo, “muy sostenido en el tiempo”.

“Se han formado muchas compañías y El Teatrino viene a ser como la culminación de un proceso en el cual los títeres han alcanzado la suficiente madurez como para que la capital provincial tenga una sala especialmente dedicada a ellos”, contó, y destacó que la creciente popularidad se refleja en el público que asiste, cada año, al Festival Internacional Títeres de Vacaciones, que se realiza durante las vacaciones de invierno en El Teatrino y en varias ciudades del interior.

Primera escuela de formación titiritera

En 2009 esta sala platense abrió la primera Escuela de Titiriteros en la ciudad, de dos años de duración, y que enseña tanto acerca de los métodos tradicionales como de los
contemporáneos.

Fuente: Hoy

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