Martes 01 de octubre de 2013 | Publicado en edición impresa
El viernes comienza el esperado encuentro artístico que acerca al público porteño los mayores exponentes del teatro internacional
Interiors, de la compañía Vanishing Point, que se presentará en el Teatro Regio. Foto: Archivo / Gza. Fiba
En tres días, comienza la novena edición del Festival Internacional de Buenos Aires (FIBA), el acontecimiento bienal dedicado a las artes escénicas, la música y las artes visuales más importante del país. Organizado por el gobierno porteño y con la dirección artística de Darío Lopérfido, se llevará a cabo hasta el domingo 20 en 26 salas de la ciudad, con la presentación de más de 50 espectáculos de cuatro continentes junto con la programación nacional.
Habrá muchos nombres fuertes y propuestas atractivas, como el regreso a un escenario porteño de Romeo Castellucci, una de las grandes figuras de la escena del mundo. El artista italiano ya había sido programado en la edición del FIBA de 1999 cuando trajo Orestea (sobre La Orestíada , de Esquilo). Esta vez vendrá con Sul concetto di volto nel figlio di Dio , obra en la que centra su mirada en la figura de Jesús. Este año, el director recibió el León de Oro en la Bienal de Teatro de Venecia. Allí presentó la misma obra que se verá en el Teatro 25 de Mayo porteño. A continuación, lo mejor y lo más esperado de lo que vendrá con el festival.
"La mirada en la época de la información es un campo de batalla terrible: vivimos un fascismo de las imágenes. Llegas a una estación y tienes que ver anuncios grandes como palacios. No puedes no verlos [...] En el teatro, en cambio, tomas responsabilidad sobre lo que ves, no son imágenes con un solo significado, con un mensaje. En el teatro tú construyes, hay encuentro", dijo en su oportunidad a un diario catalán.
En esa cumbre de las artes escénicas, estuvo la compañía Peeping Tom. El grupo tiene su sede en Bélgica. Lo dirigen el francés Franck Chartier y Gabriela Carrizo. Ella es cordobesa. Estuvo alguna vez en el FIBA como parte de la compañía de Alain Platel. Ahora, por primera vez, vendrá con su propia compañía para presentar 32, Rue Vandenbranden. Se trata de un trabajo hipnótico de un potente despliegue coreográfico y visual que se ha ganado merecidos premios y elogios en distintas partes del mundo.
También con sede en Bélgica, llega la compañía Troubleyn. Desde su fundación, la dirige Jan Fabre, quien es otra de las grandes personalidades del festival. Presentará The Power of Theatrical Madness (El poder de la locura teatral), un nuevo montaje de esta obra que estrenó en 1984. Fabre es escultor, diseñador, dramaturgo, director de escena y coreógrafo. De volver a Venecia, en la Bienal de 2011 presentó cinco esculturas realizadas en mármol de Carrara. Una de ellas imitaba a La Piedad, de Miguel Ángel. Claro que venía con un detalle que levantó polémicas y que podría dar cuenta de su mirada como artista: el rostro de la virgen era una calavera y él aparecía en el lugar de Cristo. Además, presentará Preparatio mortis, un solo de danza en donde la muerte y las flores son sus protagonistas.
Como en ediciones anteriores, el teatro berlinés nuevamente será parte de la programación internacional. De la Schaubühne viene Ein Volksfeind (Un enemigo del pueblo, de Henrik Ibsen), con puesta de Thomas Ostermeier (el mismo director que ya visitó Buenos Aires hace dos años cuando presentó su versión de Hamlet). Por su parte, el Deutsches Theater presentará Diebe, con puesta de Andreas Kriegenburg.
Como también es costumbre, la escena francesa volverá a tener una importante presencia. De hecho, el montaje Fous de Bassin será el encargado de abrir el festival con una propuesta que tendrá lugar en el mismo dique 2, de Puerto Madero, en un megaespectáculo al aire libre. Eso será el viernes, a las 20. Como contrapunto a un montaje de gran formato, de Francia también vendrá La Bibliothèque, una experiencia íntima que desplegará sus páginas en diversas bibliotecas municipales de la ciudad.
Interiors, de la compañía inglesa Vanishing Point, suma su particularidad en lo que hace a la utilización del espacio escénico. La propuesta transcurre en un living de una casa, detrás de unos enormes ventanales convirtiendo al público en una especie de voyeur. Tanto su director, Matthew Lenton, como la cordobesa Gabriela Carrizo, la codirectora de 32, Rue Vandenbranden, darán workshops sobre sus métodos de trabajo como parte de las actividades paralelas que desarrolla el festival.
TODOS LOS MUNDOS, UN MUNDO
En el FIBA no todo estará concentrado en la escena europea. Como parte de un convenio macro entre Buenos Aires y el Festival Santiago a Mil, el teatro chileno estará representado por dos espectáculos que darán cuenta del nuevo panorama de la escena trasandina. También llegarán montajes de Uruguay (Bienvenido a casa, del Pequeño Teatro de Morondanga) y México (El rumor del incendio, por la compañía Lagartijas Tiradas al Sol).
El panorama de la franja de espectáculos internacionales se completa con los australianos de la compañía Finucane & Smith, que traerán el cabaret Glory Box, que irá a La Trastienda; del Congo se ofrecerá Shéda, en el parque Centenario, y de Polonia se presentará III Furies, que irá al Teatro San Martín. Así se completa el listado de 16 montajes de otros países que, en general, suelen acaparar la atención del público local.
La visita de algunos grandes creadores de la escena mundial se complementará con la proyección de películas de sus obras (es el caso de Castellucci, por ejemplo). El ciclo, a su vez, incluye la proyección de obras de otras figuras fundamentales de la escena mundial (se podrá ver, por ejemplo, el espectáculo Tambours sur la Digue, de Ariane Mnouchkine), y el film Brook para Brook (película en la que el hijo de Peter Brook retrata a su padre ), o Los posibles, el film de Santiago Mitre y Juan Onofri Barbato inspirado en la obra coreográfica del grupo KM 29.
También se exhibirán las últimas películas del director Matías Piñeiro: Viola y Rosalinda. Piñeiro suele trabajar con los intérpretes más reconocidos de la escena independiente porteña. Franja que, en esta edición, abarcará propuestas de Lola Arias, Lisandro Rodríguez, Alberto Ajaka, Mariano Pensotti, Leticia Mazur, Pablo Rotemberg, Claudio Tolcachir, Carlos Casella y Romina Paula, entre tantos otros directores que esperan la visita de curadores internacionales para seguir proyectando sus trabajos.
La presencia nacional contempla también un ciclo con montajes de Rafael Spregelburd (incluirá el estreno de la obra Spam) y una retrospectiva dedicada a Alejandro Acobino, el joven director, actor y dramaturgo que falleció en noviembre de 2011. El punto de partida de esta nueva edición del FIBA es el viernes. El primer espectáculo programado en una sala pertenece al belga Jan Fabre e irá al Regio. El último, el domingo 20, pertenece a Federico León e irá en el Cultural San Martín. Entre uno y otro, el teatro del mundo volverá a pasar por Buenos Aires.
DATOS, PRECIOS Y HORARIOS
La información completa y detallada del Festival Internacional de Buenos Aires aparece en la página de Festivales del Ministerio de Cultura porteño (festivales.buenosaires.gob.ar). Desde ahí mismo se pueden adquirir las localidades. Desde que salieron a la venta, en los primeros tres días se adquirieron 18.000 localidades. Esa cifra implica el 60 por ciento de las entradas que están en venta. El valor para los espectáculos internacionales es de 50 y 90 pesos. Para los montajes nacionales, es de 25.
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