Como hace más de un siglo, los inmigrantes volvieron a Berisso

Emoción y color en el puerto

Diagonales / 12.09.2011 | Con el desembarco, las colectividades se adueñaron de la fiesta. La agenda de actividades

La sirena sonó a lo lejos y el barco realizó su pasada triunfal frente al puerto de Berisso. Los brazos en alto agitando pañuelos de los descendientes de las distintas colectividades asentadas desde hace más de un siglo en la capital del inmigrante provocaron la primera ovación.

Lo hicieron con las ropas típicas de siempre; con las viejas maletas, algunas de ellas conservadas como piezas de museo desde aquellos años duros; con los pasaportes de un amarillento auténtico; con las banderas de sus países, con la emoción en el rostro.

El tradicional desembarco congregó a una multitud a la vera del canal principal, e hizo sentir que la ciudad está, efectivamente, en el mes de su celebración más importante. Los espectadores, llegados también de La Plata y Ensenada, se acomodaron en las gradas levantadas sobre las estructuras de los viejos saladeros. Otros se aferraron a las vallas, para ver todo de más cerca. Todos agitaron las banderitas argentinas en señal de bienvenida. Una legión de barquitos y veleros acompañaron la llegada.

Un rato antes, habían bajado de otro barco las reinas de las diferentes colectividades, las cuales se disputaran el cetro provincial el 1º de octubre.

Por una cuestión de estricto orden alfabético, los primeros en pisar tierra firme fueron los albaneses. El locutor habló del éxodo al que fue sometido ese pueblo europeo, víctima de las guerras y de la hambruna. Los berissenses reconocieron en ellos el haber sido motores de la creación de las Asociación de Entidades Extranjeras.

Algunas semanas antes, como cada año, esa asociación convoca a las distintas representaciones, las cuales tienen su propia organización, para organizar la festividad. Quedan pocos, pero son visibles, los protagonistas directos de aquellas oleadas inmigratorias que hizo crecer la demografía argentina. Son sus descendientes, hijos, nietos y bisnietos, los que se arropan para recrear el momento histórico.

Los árabes constituyeron el segundo grupo pisar tierra firme. Con turbantes y portando la bandera roja, blanca y negra, se encaminaron hasta al palco donde saludaron a las autoridades, y desfilaron paralelo a las gradas, saludando y agradeciendo la bienvenida. “Fueron tintoreros y sastres”, dijo el locutor, y nombró a algunos de los protagonistas del desembarco original: Elias Mustafá, Ale Jalil, y las familias Nazar y Nadef, entre otras.

Alemanes y armenios siguieron en la lista en un ritual similar. Los primeros, que entre 1810 y 1860 representaron el 22% de la totalidad de los extranjeros asentados en el país. Y los segundos que llegaron espantados por la persecución de parte del imperio turco. Hubo allí, reconocimiento para Elías Korian y sus hijas y sobrinas, que llegaron trayendo consigo a huérfanos del genocidio.

La música típica de cada país ganó la escena ante cada desembarco. Ocurrió cuando bajaron las familias Bielorrusas, llegadas principalmente durante la década del 20; y los búlgaros, quienes nutrieron las masas de obreros que trabajaron en la región. Hubo entonces recuerdos para los Ridof, los Gargorof, y los Mitof, entre otras familias tradicionales.

Los croatas bajaron cargando en su equipaje una vulneración de su identidad nacional. Expusieron a la multitud su pasaporte y su bandera, como resistencia a esa mutilación. No eran, al arribar, reconocidos como tales. “Se los consideraba austríacos, húngaros, o dálmatas. Les fue negada su verdadera identidad nacional”, dijo el locutor, y mencionó como miembro de aquella avanzada a Juan Bucetich, pero también a Hernando Mihanovich y a Santiago Bunatich.

Siguieron los caboverdiano, que hicieron base en Ensenada, y los Eslovacos, que llegaron a ser 30.000 en todo el país. Después los españoles, donde descolló un catalán que llegó a Berisso teniendo 13 años. “Este es mi pasaporte original, y esta la maleta que usé en aquel viaje”, dijo el hombre ante el aplauso generalizado.

El celeste oscuro de la bandera griega hizo juego con el cielo totalmente despejado que acompañó a los inmigrantes. Los miembros de la Colectividad Helénica y Platón de Berisso desembarcaron defendiendo el legado de Juan Yeppo y Nicolás Colipolitis, precursores de esa comunidad. Se instalaron en Berisso primero por la presencia del puerto y segundo por la existencia de los frigoríficos, importantes fuentes de trabajo.

Los irlandeses de la comunidad San Patricio de Berisso y Ensenada, y los italianos, fueron las colectividades que siguieron. Estos últimos, sin duda, los más numerosos, y los que se hicieron acreedores de la mayor ovación. Cientos de descendientes de italianos saludaron el desembarco desde las graderías, cuando la bandera verde, blanca y roja paseó por el puerto para cuya conbstrucción ellos mismos colaboraron con su mano de obra.

Lituanos, polacos, portugueses, ucranianos y yugoslavos, fueron los últimos en pisar suelo berissense para dar por concluida la ceremonia.

PARA TENER EN CUENTA Y AGENDAR

Sábado 17

12. Presentación de las Reinas, Festival de las Colectividades y Patio de Comidas Típicas. Carpa Centro Cívico, Avenida Montevideo entre 10 y 11

Domingo 18

12. Festival de Colectividades y Patio de Comidas Típicas. Carpa Centro Cívico, Avenida Montevideo entre 10 y 11

Jueves 22

Premio "Adris Jalil" en el Hipódromo de La Plata.

Sábado 24

Regata del Inmigrante

12. Festival de Colectividades, Patio de Comidas Típicas. Carpa Centro Cívico, Avenida Montevideo entre 10 y 11.

Domingo 25

12. Festival de Colectividades, Patio de Comidas. Coronación de las Reinas Infantiles. Carpa Centro Cívico, Avenida Montevideo entre calles 10 y 11

Sábado 1 de octubre

Maratón del Inmigrante

12. Festival de Colectividades, Patio de Comidas Típicas y elección de la XXXIV Reina Provincial del Inmigrante. Carpa Centro Cívico, Avenida Montevideo entre 10 y 11.

Domingo 2 de octubre

Festival de Colectividades, Patio de Comidas. (Carpa Centro Cívico) y desfile de clausura de la XXXIV Fiesta. Centro Cívico, Avenida Montevideo entre 10 y 11.

Fuente: http://www.elargentino.com/nota-157359-Como-hace-mas-de-un-siglo-los-inmigrantes-volvieron-a-Berisso.html