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0221.com.ar hizo un recorrido por todos los rincones del Pasaje Dardo Rocha en la semana en que comenzaron los primeros trabajos de restauración.
Por Matías Moscoso
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| En todos los rincones del Pasaje Dardo Rocha los techos están a punto de caerse.Foto: AGLP |
Por debajo de calle 49, en dirección a avenida 7 desde calle 6, y a metros de una de las esquinas más emblemáticas de La Plata, corre un pasillo extenso y no tan estrecho que podría ser la ambientación ideal para otra película sobre la Segunda Guerra Mundial.
No hay luz y uno tiene que caminar sobre la tierra esquivando escombros, charcos de agua, estructuras destrozadas y animales muertos. Los rayos del sol entran por las ventanas rotas como las palomas y las ratas, y los cables que cuelgan entre las paredes redondean una escena apocalíptica. Es el lugar donde se levantan los cimientos del histórico Pasaje Dardo Rocha.
"La conclusión tras este relevamiento fue que el estado es catastrófico", le dice a 0221.com.ar su director, Cristian Scarpetta, mientras alumbra con su celular el escalón que conduce al sótano de esta construcción fundacional que es centro cultural desde 1926 por gestión del exgobernador bonaerense Luis Monteverde. Hoy, 138 años después de que en este lugar empezara a entrar y salir gente todos los días, la Municipalidad encabeza una remodelación estructural y en la gestión del intendente Julio Alak prometen que será inédita.
Tras la apertura de los sobres de licitación y con una inversión de $2.815.773.859,41, la primera etapa de las obras comenzará oficialmente el lunes 27 de enero y demorará 4 meses, aunque antes se hará una inauguración previa y parcial para mostrar los avances sobre calle 50: será el martes 25 de febrero, día en que también se levantará el telón de la nueva Plaza San Martín, hoy en día clausurada al público -desde hace más de 6 meses- al igual que Plaza Italia y Plaza Rocha.
En esta semana ya empezaron a realizar algunas tareas de limpieza en las veredas y paredes que rodean la estructura. Es lo que llaman "la envolvente" del edificio, que tiene como gran problema la destrucción del techo, con agujeros y filtraciones por los que la lluvia ingresa como cataratas. En uno de los baños directamente el techo se rompió y todo el material cayó sobre un inodoro y el resto del piso. "Y eso mismo puede empezar a pasar en otras partes", dice Scarpetta.
Los techos altos de los pasillos, baños, camarines, aulas, salones y hasta del auditorio por el que alguna vez tocaron Virus, Mister América y los Peligrosos Gorriones, entre otros, están rotos y con manchas de humedad. Esta enorme sala está clausurada bajo llave porque hay riesgo de electrocución en las paredes, algo parecido a lo que ocurre en la histórica Escuela Taller de Arte, uno de los sitios emblemáticos del Pasaje, hoy abandonado y convertido en depósito porque hay peligro de derrumbe: "Cuando afuera llueve, acá adentro también".
Mientras tanto, se están mudando hacia otros lugares todas las oficinas que no dependen de la Secretaría de Cultura de la Comuna: ya se fueron Derechos Humanos, Género, la Fundación La Plata, algunas de la UNLP, de Educación y más. Para más adelante se está gestionando la instalación de nuevos despachos para desarrollar proyectos vinculados con empresas de la ciudad, como por ejemplo Globant.
En el Museo Municipal de Arte (MUMART), muchas exposiciones quedan truncas por todos estos problemas estructurales. Además de los peligros de derrumbe en los techos y las filtraciones por las lluvias, la humedad que hay en la sala es un punto que atenta contra las normales condiciones que debería tener una muestra de pintura o escultura.
La restauración
"Imaginate cómo va a cambiar esta sala histórica con el techo iluminado y todas las ventanas arregladas y abiertas", adelanta el director del Pasaje momentos previos a subir hasta la terraza en uno de los ascensores de antaño, que también se van a restaurar. En la otra punta, en la esquina de 6 y 49 actualmente funciona el café, que en un futuro va a integrar al estudio de radio y de stream con vista a la vereda, otra de las novedades que incluye este proyecto de restauración.
En resumen, la primera etapa de trabajos incluirá el techo, los baños, la instalación eléctrica, las veredas y el entorno, incluidas las luminarias de calle 49 que hoy están cortadas por la mitad porque se robaron las farolas, algo inimaginable para quienes levantaron los primeros ladrillos de este ícono arquitectónico platense bajo la supervisión de Dardo Rocha, cuando la capital de la provincia de Buenos Aires empezaba a deslumbrar al mundo por su trazado e ideas innovadoras.
En el pliego se detalla que la obra incluye tareas de demolición; movimiento de suelos, contrapisos, solados, rampas; puesta en valor; instalaciones sanitarias, eléctricas y electromecánicas; cielorrasos; carpinterías, vidrios, herrerías y toldos; pintura, equipamiento, paisajismo y radio municipal.
Por lo pronto, todos los eventos históricos que se desarrollan anualmente en el hall del piso a cuadros blancos y negros se van a seguir llevando a cabo durante 2025 sin modificaciones, mientras continúan los trabajos, anticipan las autoridades.
Abajo, en el sótano y en silencio, aguarda las novedades la galería subterránea oscura y olvidada, signo de un abandono imperdonable que es un puñal para la historia de esta ciudad.
Fuente: 0221.com.ar
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