Personajes | Elena Roger (37)
Hará “Evita” en Broadway junto a Ricky Martin y estrena un protagónico en cine. Ecología, espiritualidad y los costos del éxito.
Por Valeria García Testa
Se entrega ciento por ciento a cada cosa que hace, pero sin dejarse enjaular en rótulos ni en promesas de éxitos seguros. Puede encarnar a Evita o a Edith Piaf y tener reconocimiento internacional. También protagonizar “Un amor”, el film de Paula Hernández, o salir de gira con sus canciones. En el 2012 volverá a ser Eva Perón, esta vez junto a Ricky Martin y en Broadway, la meca de la comedia musical. Sin embargo, Elena Roger no es nada de eso sino ella misma. La de piel blanquísima y cuerpo menudo, en el que puede habitar tanta intensidad interpretativa que asusta la idea de que se le rompa.
Llega cansada, “con baja energía” y pide una botella de agua fría con mucho limón. Acepta su fatiga y postula que no todo depende absolutamente de uno, que hay que hacerse cargo de la parte que a cada quien le corresponde y, a su vez, amoldarse a los cauces de la vida. Esa lección la aprendió hace una década, cuando de repente su papá, un tipo por entonces de 57 vigorosos años, sufrió un ACV. La crisis económica del 2001 se le detonó en el cuerpo y lo dejó 45 días en coma. Tuvieron que operarlo. “Desde ese momento… empecé a cambiar mi punto de vista y también a aceptar, a relajar”, confiesa con tono bajo y pausado. Su padre quedó hemipléjico, no habla pero camina, no escribe pero aprendió a dibujar con la mano izquierda y pinta mandalas. “No es el papá que yo tenía, pero es otro ser hermoso que nos enseñó muchas cosas en todos estos años”. Paradoja, desde aquel episodio familiar bisagra, ella empezó a descollar profesionalmente y también aflojó sus obsesiones.
Noticias: Después del ACV de su padre, ¿usted se volvió más espiritual?
Roger: Siempre lo fui, pero la forma en la que te tomás la vida y como te amoldás a ella es otra cosa: qué hacés para que las cosas fluyan bien, qué replateás de tus acciones en vez de culpar al otro, si decidís criticar o no. También ser positivo, tratar de tomarte la vida como un juego. Nos han enseñado a preocuparnos tanto por ver qué nos sale, qué no, ser primeros, llegar a no sé dónde, tener tanta plata, cinco plasmas, un 0km, que nos olvidamos de vivir.
Es vegetariana desde que en el 2006 se fue a Londres, elegida por Andrew Lloyd Webber para reponer “Evita”. Allá la carne no era muy buena y eso la animó a cambiar la dieta. También practica el consumo responsable (por eso será casi un insulto pedirle que mencione sus marcas de preferencia) y pone su imagen al servicio de una campaña solidaria de “Cosecha Vintage” por la que esa marca de ropa dona mantas hechas con retazos de medias de nylon, un material que tarda 200 años en desintegrarse. “Para mí hay algo que es importante y a lo que no se le da bolilla: la naturaleza, el planeta, lo espiritual”, postula.
Noticias: ¿Qué hace con su “basura” mental?
Roger: Meditación, yoga. También trato de aceptar el momento de baja energía, no resistirlo. Hace poco fui a ver a una médica ayurveda que me decía que trate de descansar el primer día de la menstruación, que a mí me duele mucho. Ese famoso “día de la mujer” que nosotras no lo queremos tener más, es necesario. Todos estamos como obligados a no sentirnos mal, a no enfermarnos, a no tener un día de bajón… entonces tomamos pastillas y pastillas. Así matás al síntoma, pero lo que te molesta sigue existiendo.
Noticias: En “Un amor” las cuestiones del pasado molestan al presente. ¿Usted tiene cuentas pendientes?
Roger: No, creo que no, pero soy bastante nostálgica, algo que me gustaría dejar de ser. Recuerdo momentos de felicidad del pasado, me angustio, aunque esté viviendo un buen momento presente… nos veo grandes a mis hermanos y a mí, veo grandes a mis viejos y me angustia (los ojos se le ponen vidriosos), qué sé yo…
Noticias: Tiene que ver con la sensibilidad también, ¿no?
Roger: Sí, con esa hipersensibilidad que permite un montón de cosas y a la vez…
Noticias: ¿Cómo maneja el equilibrio entre la vida personal y las oportunidades profesionales?
Roger: Esa es una eterna pregunta que yo me hago, pero no divido más. Creo que todo tiene que ver con todo, que ahora me vaya a Broadway hace que pierda cosas de mi vida personal… es una mudanza, mi mamá está angustiada, mi hermana está angustiada, yo estoy angustiada… o sea, en enero me voy y ya es todo un drama. Pero también hace que yo crezca personal, profesional, espiritualmente, tiene un porqué. Si en un momento me doy cuenta de que ese porqué no me hace nada feliz o no es lo que esperaba que fuera, puedo decir chau.
Noticias: Hace cine, teatro, canta, graba cds, ¿le cuestionan esa variedad de expresión artística?
Roger: Claro, dicen “por qué no cantás solo tango”, “por qué no te dedicás sólo a…” y yo quiero ser libre… para mí hay mucha unidad en todo lo que hago. Yo siento que en comedias musicales ya llegué a un tope y quiero ir por más, aprender a hacer cine, ir por la actriz, hacer teatro o dar recitales.
Noticias: ¿Se resiste a que la encasillen?
Roger: No me gusta la palabra resistir, es más simple que eso, es mi manera. Pienso que el arte es liberación, expresión y desarrollo de lo que vos querés decir, no tengo que ser igual a nadie ni nadie tiene que ser igual a mí. Me metí dentro del sistema de la comedia musical pero si yo (acentúa la última vocal) quiero decir algo, lo digo como lo quiero decir.
Noticias: ¿Siempre lo tuvo así de claro?
Roger: Cuando armamos “Nina…che cosa sei?”, un show en italiano, que no tenía ni pies ni cabeza y que fue un éxito; dije “yo puedo”. Con mi disco “Vientos del Sur”, por ejemplo, si hubiese tenido una compañía discográfica, seguramente me hubieran dicho que no podía hacer una chacarera.
Noticias: Dice que hacer “Evita” en Broadway no es lo más importante que puede pasarle en la vida, ¿Qué es lo más importante?
Roger: (piensa) No voy por esos lados, para mí hay muchas cosas importantes que me pasan día a día, en mí no va por tener un millón de dólares… tiene que ver con cómo me siento, lo más importante es levantarme y ser feliz por el día que tengo por vivir… seguramente tiene que ver con la vida, no con un trabajo, una apariencia equis o con dinero…
Noticias: Con su pareja, Mariano Torre, ¿maneja mejor las distancias?
Roger: Sí, porque siento que él va a poder ir y venir, aunque también me da miedo.
Noticias: ¿De que se enfríe la relación?
Roger: No, eso no. Me da miedo necesitarlo y no poder tenerlo, pero también hay una aceptación de que la profesión de alguna manera es así.
Noticias: Ha dicho que podría parar dos años solo para ser madre, ¿lo sigue pensando?
Roger: Sí (piensa)… me da ganas pero no sé si puedo, nunca lo probé, no estamos buscando ni nada, no sé si vamos a buscar… también esa es otra de las cosas que la sociedad impone a la mujer, a las parejas: ¿cómo? todavía no te casaste, ¿cómo? estás soltera, ¿cómo? no tuviste hijos… Con mi pareja no estamos ni cerca de seguir los parámetros de la sociedad… vamos a hacer lo que nosotros queramos y no nos importa mucho la opinión de los demás. Eso también tiene que ver con la felicidad. Creo que muchas cosas nos angustian porque estamos sometidos a actuar de una manera, a seguir los mandatos.
Noticias: ¿Ser exitosa fue un mandato para usted?
Roger: No, nunca nadie me exigió ni que me sacara buenas notas en el colegio. Si me sacaba siete estaba bien porque pasaba, no hacía falta sacarse diez.
Noticias: ¿Tanto aplauso la mareó alguna vez?
Roger: No. No soy la misma chica de cuando empecé, pero llevo mucho de eso. El reconocimiento de la gente me dio la posibilidad de volver a ser quien era.
Fuente: http://www.revista-noticias.com.ar/comun/nota.php?art=3516&ed=1820
Hará “Evita” en Broadway junto a Ricky Martin y estrena un protagónico en cine. Ecología, espiritualidad y los costos del éxito.
Por Valeria García Testa
Se entrega ciento por ciento a cada cosa que hace, pero sin dejarse enjaular en rótulos ni en promesas de éxitos seguros. Puede encarnar a Evita o a Edith Piaf y tener reconocimiento internacional. También protagonizar “Un amor”, el film de Paula Hernández, o salir de gira con sus canciones. En el 2012 volverá a ser Eva Perón, esta vez junto a Ricky Martin y en Broadway, la meca de la comedia musical. Sin embargo, Elena Roger no es nada de eso sino ella misma. La de piel blanquísima y cuerpo menudo, en el que puede habitar tanta intensidad interpretativa que asusta la idea de que se le rompa.
Llega cansada, “con baja energía” y pide una botella de agua fría con mucho limón. Acepta su fatiga y postula que no todo depende absolutamente de uno, que hay que hacerse cargo de la parte que a cada quien le corresponde y, a su vez, amoldarse a los cauces de la vida. Esa lección la aprendió hace una década, cuando de repente su papá, un tipo por entonces de 57 vigorosos años, sufrió un ACV. La crisis económica del 2001 se le detonó en el cuerpo y lo dejó 45 días en coma. Tuvieron que operarlo. “Desde ese momento… empecé a cambiar mi punto de vista y también a aceptar, a relajar”, confiesa con tono bajo y pausado. Su padre quedó hemipléjico, no habla pero camina, no escribe pero aprendió a dibujar con la mano izquierda y pinta mandalas. “No es el papá que yo tenía, pero es otro ser hermoso que nos enseñó muchas cosas en todos estos años”. Paradoja, desde aquel episodio familiar bisagra, ella empezó a descollar profesionalmente y también aflojó sus obsesiones.
Noticias: Después del ACV de su padre, ¿usted se volvió más espiritual?
Roger: Siempre lo fui, pero la forma en la que te tomás la vida y como te amoldás a ella es otra cosa: qué hacés para que las cosas fluyan bien, qué replateás de tus acciones en vez de culpar al otro, si decidís criticar o no. También ser positivo, tratar de tomarte la vida como un juego. Nos han enseñado a preocuparnos tanto por ver qué nos sale, qué no, ser primeros, llegar a no sé dónde, tener tanta plata, cinco plasmas, un 0km, que nos olvidamos de vivir.
Es vegetariana desde que en el 2006 se fue a Londres, elegida por Andrew Lloyd Webber para reponer “Evita”. Allá la carne no era muy buena y eso la animó a cambiar la dieta. También practica el consumo responsable (por eso será casi un insulto pedirle que mencione sus marcas de preferencia) y pone su imagen al servicio de una campaña solidaria de “Cosecha Vintage” por la que esa marca de ropa dona mantas hechas con retazos de medias de nylon, un material que tarda 200 años en desintegrarse. “Para mí hay algo que es importante y a lo que no se le da bolilla: la naturaleza, el planeta, lo espiritual”, postula.
Noticias: ¿Qué hace con su “basura” mental?
Roger: Meditación, yoga. También trato de aceptar el momento de baja energía, no resistirlo. Hace poco fui a ver a una médica ayurveda que me decía que trate de descansar el primer día de la menstruación, que a mí me duele mucho. Ese famoso “día de la mujer” que nosotras no lo queremos tener más, es necesario. Todos estamos como obligados a no sentirnos mal, a no enfermarnos, a no tener un día de bajón… entonces tomamos pastillas y pastillas. Así matás al síntoma, pero lo que te molesta sigue existiendo.
Noticias: En “Un amor” las cuestiones del pasado molestan al presente. ¿Usted tiene cuentas pendientes?
Roger: No, creo que no, pero soy bastante nostálgica, algo que me gustaría dejar de ser. Recuerdo momentos de felicidad del pasado, me angustio, aunque esté viviendo un buen momento presente… nos veo grandes a mis hermanos y a mí, veo grandes a mis viejos y me angustia (los ojos se le ponen vidriosos), qué sé yo…
Noticias: Tiene que ver con la sensibilidad también, ¿no?
Roger: Sí, con esa hipersensibilidad que permite un montón de cosas y a la vez…
Noticias: ¿Cómo maneja el equilibrio entre la vida personal y las oportunidades profesionales?
Roger: Esa es una eterna pregunta que yo me hago, pero no divido más. Creo que todo tiene que ver con todo, que ahora me vaya a Broadway hace que pierda cosas de mi vida personal… es una mudanza, mi mamá está angustiada, mi hermana está angustiada, yo estoy angustiada… o sea, en enero me voy y ya es todo un drama. Pero también hace que yo crezca personal, profesional, espiritualmente, tiene un porqué. Si en un momento me doy cuenta de que ese porqué no me hace nada feliz o no es lo que esperaba que fuera, puedo decir chau.
Noticias: Hace cine, teatro, canta, graba cds, ¿le cuestionan esa variedad de expresión artística?
Mujeres fuertes. En “Evita”
Noticias: ¿Se resiste a que la encasillen?
Roger: No me gusta la palabra resistir, es más simple que eso, es mi manera. Pienso que el arte es liberación, expresión y desarrollo de lo que vos querés decir, no tengo que ser igual a nadie ni nadie tiene que ser igual a mí. Me metí dentro del sistema de la comedia musical pero si yo (acentúa la última vocal) quiero decir algo, lo digo como lo quiero decir.
Noticias: ¿Siempre lo tuvo así de claro?
Roger: Cuando armamos “Nina…che cosa sei?”, un show en italiano, que no tenía ni pies ni cabeza y que fue un éxito; dije “yo puedo”. Con mi disco “Vientos del Sur”, por ejemplo, si hubiese tenido una compañía discográfica, seguramente me hubieran dicho que no podía hacer una chacarera.
Noticias: Dice que hacer “Evita” en Broadway no es lo más importante que puede pasarle en la vida, ¿Qué es lo más importante?
Noticias: Con su pareja, Mariano Torre, ¿maneja mejor las distancias?
Roger: Sí, porque siento que él va a poder ir y venir, aunque también me da miedo.
Noticias: ¿De que se enfríe la relación?
Roger: No, eso no. Me da miedo necesitarlo y no poder tenerlo, pero también hay una aceptación de que la profesión de alguna manera es así.
Noticias: Ha dicho que podría parar dos años solo para ser madre, ¿lo sigue pensando?
Roger: Sí (piensa)… me da ganas pero no sé si puedo, nunca lo probé, no estamos buscando ni nada, no sé si vamos a buscar… también esa es otra de las cosas que la sociedad impone a la mujer, a las parejas: ¿cómo? todavía no te casaste, ¿cómo? estás soltera, ¿cómo? no tuviste hijos… Con mi pareja no estamos ni cerca de seguir los parámetros de la sociedad… vamos a hacer lo que nosotros queramos y no nos importa mucho la opinión de los demás. Eso también tiene que ver con la felicidad. Creo que muchas cosas nos angustian porque estamos sometidos a actuar de una manera, a seguir los mandatos.
Noticias: ¿Ser exitosa fue un mandato para usted?
Roger: No, nunca nadie me exigió ni que me sacara buenas notas en el colegio. Si me sacaba siete estaba bien porque pasaba, no hacía falta sacarse diez.
Noticias: ¿Tanto aplauso la mareó alguna vez?
Roger: No. No soy la misma chica de cuando empecé, pero llevo mucho de eso. El reconocimiento de la gente me dio la posibilidad de volver a ser quien era.
Fuente: http://www.revista-noticias.com.ar/comun/nota.php?art=3516&ed=1820
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