05-08-2010 / Las clases de actuación se brindarán en La Alborada y en la Agremiación Médica
El mismo Rafael Gimeno quiere presentarse y ofrecer "un semblante para que la gente sepa de dónde vengo" y porque al comunicar que abrirá dos cursos de teatro cree que "no debe ser fácil para los demás que lo dé una persona ciega, es algo fuera de lo común".
En una charla con Diagonales, el actor y director expresó su deseo de que muchas personas concurran a los talleres de actuación y lectura teatral que dictará los jueves desde las 18.30 hasta las 21, en la Agremiación Platense (6 Nº 1337 entre 55 y 56) y los viernes de 19 a 20 en la Biblioteca La Alborada (58 Nº 774 entre 10 y 11).
Para aquellos que no lo conocen, el propio Gimeno contó como nació su vocación: "yo comienzo como actor en la escuela de teatro de la calle 51 y hay una de las personas que hizo que yo abrazara este oficio: Oscar Sobreiro. Sinceramente, yo no tenía ni idea y nunca pensé en hacer teatro, pero una vez me encontré con un conocido en la calle y me pidió que lo acompañe a la escuela de teatro. Mientras él hacía los papeleríos, yo empecé a leer las materias que había y me interesó porque había mucho movimiento y como tuve un problema de chico para caminar, el movimiento para mí era lo más. Cuando comencé a adentrarme, el teatro pasó a ser mi filosofía de vida".
A Oscar Sobreiro lo define como "un gran tipo", del cual aprendió casi todo lo que sabe, sobre todo teatro argentino porque de eso "él sabía como nadie". La primera asistencia como director, Gimeno se la ganó por su "insistencia" y ayudó a montar la obra Háblame como la lluvia. Años después, conoció a Carlos Arcuri, quien lo convocó para darle clases a los alumnos de periodismo de primer año: "Corría el año 1986 y Las historias para ser contadas fue mi primera puesta y dirección. A partir de ahí, empecé a dirigir y dar clases, a armar talleres acá en La Plata, en Pilar y Bragado, compartido con mi laburo actoral, porque he hecho muchas cosas arriba del escenario", aseguró Gimeno, y nombró lo último que hizo: "un trabajo basado en dos textos de Luigi Pirandelo: El hombre con la flor en la boca y Enrique IV".
El director también mencionó a los colegas que le merecen "total respeto como profesionales". Ellos son Hugo Márquez, Norberto Barruti y Rafael Garzaniti. Aclaró que con los dos primeros tiene "una relación afectiva, porque no es obligatorio ser buen profesional, es obligatorio ser buena persona y lo demás se va moldeando y ellos son muy buenas personas". Y consideró que cada uno, con sus tres estilos diferentes, "me merecen todo el respeto".
Los talleres de actuación. Cuando llegó la hora de hablar sobre las clases, el director contó que la dinámica será simple: “Se prepara a la gente en tres fases: la primera es como actor, después como cumplir un rol y al final delineás el personaje".
Gimeno dará los "lineamientos generales" y tendrá como ayudante y colaborador al actor platense Alejandro Gómez Hurtado porque "obviamente hay cosas que a mí se me van a escapar".
Luego detalló las fases del taller: "En la primera parte voy a hacer la presentación, contar de qué se trata; en la segunda fase se harán improvisaciones sobre textos, y en la tercera habrá que agarrar un texto y empezar a delinearlo para, a fin de año hacer una puesta, que sería el cierre del taller". Además agregó que su idea es poder brindar el año que viene el segundo nivel del taller.
"A mí me costó mucho volver a insertarme, no sólo en una sociedad que te trata como paria sino en el tema artístico, porque hace 5 años que quedé ciego", fue lo que contó Gimeno, quien a partir del año 2004 comenzó a perder la visión. Aunque se daba cuenta que cada vez "veía menos" siguió dando clases, pero cuando no pudo hacerlo más entró en una "crisis", a la cual consideró "necesaria, porque significa que hay cambio". Luego explicó que pudo "salir y volver a empezar, me costó y todavía me cuesta, me siento a gritar y llorar, pero la esencia no la perdí y pienso que esto no me impide nada, eso lo quiero dejar claro para que la gente se acerque, porque la esencia como actor y director no la perdí".
Fuente: http://www.elargentino.com/nota-101507-medios-122-El-director-Rafael-Gimeno-quiere-ensenar.html
Querido amigo Rafael, soy Ivan Silva, desde chile, trabajamos a fines de los 80 con Jesús Martínez en el mediometraje el tala tierra de nadie... Un abrazo
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